Exigen respeto al derecho internacional.
Salma Pimentel/EXCÉLSIOR
CIUDAD DE MÉXICO
Ante la creciente tensión y violencia en Líbano, la comunidad mexicana de ascendencia libanesa expresó su profundo dolor y preocupación por la situación que atraviesa el país. A través de un comunicado emitido por el Consejo Directivo del Centro Libanés, manifestaron su rechazo a la violencia y abogaron por un cese inmediato de las hostilidades.
Lamentamos profundamente que el país de nuestros padres y abuelos esté sufriendo muertes, heridos, desplazados y destrucción", señaló el comunicado. La comunidad enfatizó su condena a cualquier tipo de acción contra poblaciones civiles, especialmente mujeres y niños, sin importar su nacionalidad o residencia.
En su declaración, el Consejo Directivo exigió el respeto irrestricto del derecho internacional, así como de la soberanía y el territorio libanés. "Apelamos a todas las partes para que se dé un cese inmediato de hostilidades", afirmaron, subrayando la importancia de resolver las diferencias en el marco de la diplomacia y el respeto mutuo.
La comunidad también hizo un llamado urgente a comprometerse con una paz duradera que permita la estabilidad en la región, destacando la necesidad de un esfuerzo colectivo para poner fin a la violencia que ha afectado gravemente al pueblo libanés.
El comunicado finalizó con un fuerte mensaje de esperanza, pidiendo que las acciones se orienten hacia la reconciliación y el entendimiento.
Solo mediante la paz y el respeto mutuo podremos garantizar la estabilidad y el bienestar de las futuras generaciones en Líbano y en toda la región".
