JUAN DAVID CASTILLA
XALAPA
Personal docente y administrativo protestó y tomó las instalaciones de la escuela de bachilleres Antonio María de Rivera de esta ciudad de Xalapa, para exigir la reinstalación del director José Antonio Higareda, quien fue cesado injustamente en febrero pasado.
Los trabajadores impidieron el acceso al plantel la mañana de este viernes y colocaron lonas y pancartas sobre la fachada del edificio, ubicado sobre el circuito universitario Gonzalo Aguirre Beltrán.
“Apoyamos al maestro José Antonio Higareda, pedimos claridad en su proceso y la reinstalación inmediata” y “atropello a los derechos laborales por parte de la SEV”, se leía en algunos de sus mensajes.
De acuerdo con la docente Blanca Cadena, no hay claridad en el cese del director, pues presuntamente se le señala de no entregar documentación durante la pandemia por coronavirus, pero además se antepusieron cuestiones personales en la decisión de las autoridades educativas.
“Él fue cesado injustamente en febrero pasado. Estamos solicitando su reinstalación a su plaza. Tiene 25 años de servicio. Aquí fue sustituido, fue cesado por la dirección y aparte de su plaza. En su plaza lo removieron de manera injusta, de manera arbitraria, sin darle oportunidad que tuviera derecho de réplica. Él fue señalado, juzgado y sentenciado por las autoridades, que no son competencia de ello”.
La entrevistada defendió al docente José Antonio Higareda, quien brindó 25 años de servicio a la comunidad escolar, garantizando el desarrollo académico de los alumnos.
“Lo que pasa es que hubo situaciones administrativas y financieras de las cuales ya está todo solventado, totalmente entregado en tiempo y forma, de las cuales las autoridades tenían conocimiento. Entonces aquí se mezcló un tema personal, él tiene un tema personal y bueno, yo creo que ahí argumentaron. Ese fue un pretexto y pues bueno, en eso estamos”.
También comentó que se han dado casos de acoso sexual por parte de otros trabajadores del plantel, quienes no han sido sancionados y, al contrario, han sido premiados con un incremento en horas de trabajo y el cambio de su lugar de trabajo.
“Cuando hubo personal, por ejemplo, hay maestros acosadores a los que solamente se les cambia de lugar y ellos siguen cobrando, les dan incluso hasta más horas, ellos siguen cobrando y pues bueno, aquí es un tema injustificado”, añadió Blanca Cadena.
A esta escuela llegó personal de la Dirección General de Bachillerato (DGB) para agendar una mesa de negociaciones con las manifestantes y dar seguimiento a sus demandas.
PREVÉN SANCIONES CONTRA DOCENTES QUE TOMARON ESCUELA ANTONIO MARÍA DE RIVERA
Los trabajadores que protestaron y tomaron la escuela de bachilleres Antonio María de Rivera podrían ser sancionados por afectar a más de 900 alumnos al dejarlos sin clases este viernes 5 de julio.
Así lo dio a conocer el secretario general del Sindicato Magisterial Veracruzano (SMV), Ramón Domínguez Polo, quien añadió que las sanciones podrían ser a través de actas administrativas, debido a que la manifestación carece de representatividad legal.
Los docentes que exigen la reinstalación de José Antonio Higareda Urdapilleta como director, impidieron el ingreso a los estudiantes la mañana de este viernes.
“A los maestros se les puede llamar la atención porque no hay una representatividad legal que diga que se hace responsable como sindicato de defender y justificar a los socios”.
El líder sindical enfatizó que el director cesado no permitió que la organización sindical llevara su caso.
“La toma no va a resultar porque hay una sanción. Se tiene que hablar con las autoridades educativas. La sanción que le dieron fue el cese como director y ya no supe por qué, ya que acudió con su abogado, no permitió que el sindicato llevara su caso”.
Domínguez Polo reiteró que el paro de labores es sin siglas sindicales y los docentes y administrativos podrían ser acreedores a una sanción por abandonar sus espacios laborales.
Algunas madres y padres de familia comentaron que no hay transparencia en el ejercicio de los recursos económicos que son recaudados a través de las cuotas de inscripción al inicio de cada semestre.
La última vez, algunos papás de la escuela de bachilleres Antonio María de Rivera pagaron 525 pesos por concepto de libros y 890 pesos de inscripción.