Juan David Castilla Arcos/Xalapa, Ver.-
La tradición del viejo persiste entre los xalapeños. Disfrazados de adultos mayores bailan y cantan de puerta en puerta para pedir una limosna. En algunos lugares, construyen un muñeco con ropa, cartón, periódico, aserrín y otros materiales, y lo incineran.
Lo anterior, con el propósito de “quemar malas vibras”, deshacerse de problemas e iniciar un año positivo.
En los mercados y en otros puntos de la ciudad se comercializan piñatas de papel y cartón que representan a dicho personaje. Hay quienes prefieren comprarlos ya armados.