Xalapa, Ver.- (AVC) La Arquidiócesis de Xalapa pidió justicia y un alto a la violencia y muertes que se presentan en el país desde hace algún tiempo y que incluso han impactado a la iglesia católica como ocurrió con el asesinato del sacerdote Gregorio López Gorostieta.
En comunicado oficial lamentó la desaparición violenta y la muerte del sacerdote Gregorio López Gorostieta, perteneciente a la Diócesis de Altamirano, Guerrero.
"Nos unimos al clamor generalizado por un México en el que la verdad y la justicia provoquen una profunda transformación del orden institucional, judicial y político, que asegure que jamás hechos como estos vuelvan a repetirse”.
El padre "goyito" fue encontrado con un tiro en la cabeza en el municipio de Tlapehuala, a 20 minutos de Pungarabato, lugar donde fue secuestrado por sujetos armados del seminario donde daba clases.
La Arquidiócesis elevó oraciones para que Dios reciba en su gloria al padre y conceda consuelo a sus familiares y feligreses que sienten su lamentable deceso. "De igual forma expresaron su indignación por los signos sombríos y de muerte que se han hecho presentes en esa zona del país.
"Con los obispos de México, decimos nuevamente: “¡Basta ya! No queremos más sangre. No queremos más muertes. No queremos más desparecidos. No queremos más dolor ni más vergüenza".
El padre Gregorio era originario de Nanchititla, Estado de México, fue ordenado sacerdote para la diócesis de Ciudad Altamirano y se especializó en Sagrada Liturgia en el Instituto Pontificio Litúrgico de San Anselmo, residiendo en el Colegio Mexicano de la ciudad de Roma, últimamente fungía como profesor del seminario en esa Diócesis.
