En el ataque en San Miguel El Grande han muerto dos agentes de la Fiscalía, dos municipales y Román Cruz.
EL PAÍS
CDMX
Una emboscada de un grupo armado dejó el miércoles cinco muertos en San Miguel El Grande, en la sierra mixteca de Oaxaca.
La cineasta Ángeles Cruz ha denunciado que su hermano Román es una de las víctimas, que fue asesinado junto a cuatro agentes de seguridad, dos de la Fiscalía y otros dos municipales.
La actriz mexicana ha grabado un duro testimonio en el que pide responsabilidades al gobernador Salomón Jara, a quien, afirma, ya habían advertido del peligro que corrían en la zona, tras otro ataque mortal en mayo.
El mandatario todavía no ha emitido ningún comentario sobre el crimen.
Frente al féretro de su hermano y de dos policías de la localidad, Ángeles Cruz se graba y dice:
“Hoy estamos enterrando a mi hermano; a José, nuestro nuevo agente; a Gabriel, el agente de la colonia Lázaro Cárdenas. Advertimos de que estábamos en peligro, señor gobernador, usted nos dijo que íbamos a estar seguros, y hoy estoy enterrando a mi hermano”.
“Renuncie si no puede con el cargo, renuncie si no puede garantizar nuestras vidas”, exige la guionista, que con 54 años, se ha convertido en uno de los rostros comunes en el cine y el teatro en México.
“Justicia para Guadalupe Victoria, justicia para San Miguel El Grande”, finaliza su mensaje.
La cineasta había filmado su última película, Valentina o la serenidad, en la sierra mixteca, de donde es originaria.
Su hermano Román había participado en la cinta como gerente de locaciones.
“Muchas gracias, querido Román, por el cuidado que nos diste durante el rodaje, siempre advirtiendo de los riesgos del bosque, siempre abriendo el camino a los demás, gracias por las avanzadas, gracias por toda la gestión local, para ti no había imposible, gracias por toda tu energía para hacer realidad cada día de rodaje”, ha escrito en Instagram como mensaje de despedida el equipo de la película.
Este miércoles, alrededor de las 16.30 horas, un grupo de agentes de la Fiscalía de Oaxaca acompañaban a habitantes de San Miguel El Grande, hacia su localidad.
Esa vigilancia forma parte de las medidas que ha tomado la Agencia Estatal de Investigación “por el conflicto territorial que mantiene esta población con Llano de Guadalupe, Tlaxiaco”, ha explicado la dependencia estatal.
Cuando los agentes iban a la altura del paraje Santuario de las Aves, sufrieron una emboscada por parte de un grupo armado.
En el ataque a balazos falleció en el acto el policía José Luis Daniel Calvo, su compañero Minyak Omar Moreno murió ya en el hospital de Chalcatongo.
“Murieron en el cumplimiento de su deber, por ello, reconocemos su heroísmo. Refrendamos nuestra solidaridad con sus familias y seres queridos, reiteramos nuestro compromiso de cobijo, así como de procurar el acceso a la justicia”, ha señalado en un comunicado la dependencia. Otros dos agentes de la Fiscalía, A. C. J. y J. C. C. T., resultaron heridos y están siendo atendidos en el centro médico más cercano. En ese mismo ataque fueron asesinados Román, José y Gabriel.
“Para la institución, este ataque directo representa una afrenta contra las fuerzas del Estado, por lo que se habrán de agotar todas las investigaciones y acciones para sancionar a las personas responsables de la comisión de estos hechos; ante lo cual ya se cuenta con un avance importante en la identificación de los mismos”, ha afirmado la Fiscalía de Oaxaca, que asegura que se ha enviado un fuerte operativo con más de 100 elementos, entre miembros de la Secretaría de la Defensa Nacional, de Seguridad Pública y de la Guardia Nacional.
Hace nueve meses que el Gobierno desplegó a la Guardia Nacional en esa zona de la sierra mixteca, debido a un conflicto de tierras entre San Miguel El Grande y Llano de Guadalupe.
La disputa es por 1.958 hectáreas, que según documentación pertenecen al primero, pero están ocupadas por el segundo, que dice no reconocer los registros de 1942 sobre el terreno.
El área ha estado en pelea desde hace décadas, pero detrás del conflicto agrario hay más, según ha señalado el secretario de Gobierno de Oaxaca, Jesús Romero López, que apunta hay otras actividades ilícitas, como el tráfico de armas, narcotráfico y talamontes involucrados “que no permiten que de manera sana las comunidades puedan resolver sus conflictos”.
Este año se firmaron pactos de no agresión, en las mesas de diálogo del Gobierno entre los municipios, separados por 40 kilómetros, pero este no es el primer ataque mortal. En mayo, tres hombres fueron asesinados y otras cuatro personas resultaron heridas en la colonia Lázaro Cárdenas después de un presunto ataque de los pobladores de Llano de Guadalupe.
Las víctimas estaban custodiando la zona en disputa, cuando un contingente con armas de alto calibre bajaron de la montaña para culminar la agresión, según reportó entonces El Imparcial de Oaxaca.
En el ataque también fueron quemadas 10 casas de San Miguel El Grande y varios coches.
El presidente municipal de la localidad atacada, Árcangel Ortiz, señaló que “los secuestros, las violaciones de mujeres, los robos de menores de edad, el uso de armas blancas y de fuego, y los incendios de casas y parajes”, han sido constantes desde hace años.
Tras ese crimen, la cineasta Ángeles Cruz también alzó la voz.
“Queremos compartir que tenemos mucho miedo, temor, porque la Guardia Nacional (que llegó ayer por la tarde) ha dicho que se van a retirar. Quisiéramos pedir a las autoridades correspondientes que por favor reflexionen en esa medida y puedan dejar a la Guardia Nacional hasta que haya las condiciones de seguridad para evitar mayor derramamiento de sangre”, publicó la actriz en redes sociales.
Unos meses después, uno de los fallecidos era su propio hermano.
