Agencias. Ciudad de México. María Villar Galaz, de 39 años de edad, quien fuera secuestrada en la zona de Santa Fe y encontrada muerta en Santiago Tianguistengo, Estado de México, era sobrina del presidente de la Federación Española de Futbol, Ángel María Villar.
María había llegado a México hace casi tres años junto con su marido, el brasileño Cristiano do Vale, para trabajar en la empresa Everis, dedicada al desarrollo tecnológico.
Desde hace una año, ya en México, comenzó a trabajar para la empresa IBM.
La desaparición de María fue dada a conocer el pasado 13 de septiembre por la noche, en redes sociales, por grupos de la comunidad española radicados en México.
Publica el diario “El País” que los amigos de María la describen como una mujer “alegre, simpática, divertida y enamorada de México”.
Su entorno reconoce que era una mujer brillante que había llamado la atención de la multinacional estadounidense, pero que hacía una vida normal, que le gustaba viajar por el país y que jamás llevó guardaespaldas.
Su error fue tomar “un taxi de la calle” que finalmente se convirtió en una trampa mortal. Antes de matarla, los secuestradores llevaron a María a dos cajeros para vaciarle las tarjetas.
Presuntamente el secuestro se dio cuando tomó un taxi en el centro comercial Patio Santa Fe, frente a las oficinas de IBM, para dirigirse hacia su casa en la colonia Polanco.
De acuerdo con las investigaciones, María Villar fue llevada por sus captores a dos cajeros automáticos de donde sacaron dinero.
Su marido y su primo, Gorka Villar, hijo del presidente de la Federación Española de Fútbol y exsecretario general de la Conmebol, recorrieron todas las morgues de la Ciudad de México (señala “El País”) y sus alrededores con la foto de María en la mano sin obtener respuesta alguna.
Dos negociadores de la policía nacional, habían viajado desde España con la familia, trabajaban con las autoridades mexicanas para resolver el caso.
La familia fue contactada por los secuestradores, quienes pidieron un rescate, el cual fue pagado, aunque se habla de una cantidad "muy inferior" a la que pedían y pese a ello la mujer fue asesinada, reveló “El Confidencial” de España.
Una vez que los secuestradores recibieron el dinero, la familia esperaba que en cuestión de tiempo fuera liberada. Sin embargo, las investigaciones del caso apuntan a que María Villar fue asesinada el jueves 15 de septiembre, dos días después de ser raptada.
El cuerpo fue localizado en un canal del municipio de Santiago Tianguistengo, Estado de México. Se presume que fue asfixiada.
Fuente: El Universal