Si bien México es el principal productor de nopal fresco para consumo humano a nivel mundial, con unas 12 mil hectáreas cultivadas y una cosecha que ronda las 825 mil toneladas anuales, aún hay rubros en los que se podría explotar, como la cosmética, el forraje para ganado, para la generación de biogás y electricidad o incluso para la industria farmacéutica, coincidieron expertos.
Para poder aumentar la producción en México y aplicarlo a esos sectores de manera industrial hace falta una mayor promoción que genere más inversiones del sector público y privado, pues la fabricación de shampú, jabones, fibra dietética y otros productos derivados del nopal aún se realizan de manera artesanal, explicó el investigador de la Universidad Autónoma de Chapingo, Clemente Gallegos Vázquez.
Sin embargo, para Gallegos Vázquez el futuro de esta planta está en sus frutos, en la tuna o el xoconostle, por las propiedades que tienen, como los antioxidantes, que suelen ser parecidos a los de la fresa. En el campo farmacéutico “si alguien logra identificar, aislar y purificar el ingrediente activo que causa el control de la diabetes (que podría encontrarse en el xoconostle) se va a hacer rico”, indicó, por lo que las universidades y los centros de investigación deberían poner más atención en su potencial.
El otro reto para México es enfrentar a sus dos grandes competidores, China y Brasil, los cuales ya producen nopal a gran escala. La nación asiática lo ocupa para el área cosmética, e incluso el investigador de Chapingo no descarta que esté realizando investigación farmacéutica, mientras que el país latino es el principal productor y exportador de la cactácea como forraje para ganado.
En entrevista con La Razón, Gallegos Vázquez explicó que “Brasil nos está dando la batalla porque en México prácticamente no hay producción de forraje”; la nación sudamericana tiene 600 mil hectáreas para cultivar nopal de forraje, que junto con otros elementos soporta una producción lechera diaria de un millón 200 mil litros, mientras que en nuestro país se usan las nopaleras silvestres para alimentar al ganado.
El director general del Consejo Nacional Agropecuario (CNA), Luis Fernando Haro, coincidió con el investigador de Chapingo de que China está empezando a acaparar el mercado de productos cosméticos o naturistas derivados del nopal, como jabones o fibra dietética; “le dieron valor agregado”, dijo.
Haro especificó que sólo hay una empresa productora en China, que invirtió más de 100 millones de dólares y tiene unas 400 hectáreas de nopal en invernaderos, en donde hacen uso de tecnologías para incrementar su productividad, para luego procesarlo y darle un valor agregado.
Cabe destacar que en el Depositario Nacional de Opuntia hay 410 variedades de nopal que derivan de 23 especies, de las cuales hay 62 variedades clasificadas como Opuntia Ficus-indica (o nopalito) que es el que se usa para alimento y es el que se cultiva en la zona de Milpa Alta en la Ciudad de México y en Tlalnepantla, Morelos.
Investigadores buscan generar electricidad con “oro verde”
Actualmente hay algunos proyectos en marcha en Michoacán y Aguascalientes para producir electricidad y metano (biogas) con nopal o con los desechos de su cosecha, pero para que sean eficientes hay que garantizar una producción suficiente para todo el año, la cual se deslinde de las hectáreas destinadas al cultivo del nopal como alimento o de las plantas silvestres.
El investigador de la Universidad Autónoma de Chapingo, Clemente Gallegos Vázquez, explicó que este tipo de proyectos aún están en proceso de investigación y de consolidarse, porque el nopal es una planta de temporal, por lo que hay que realizar un plan que defina cómo generar la mayor cantidad de biomasa para obtener bioenergéticos.
“Lo que debemos tener es un modelo de producción de nopal que pueda garantizar el abastecimiento a una planta industrial y no lo hay todavía, entonces estamos trabajando con variedades, probando ideas de fertilización y la idea es producir la mayor cantidad de biomasa para lograr producciones de casi 600 toneladas por hectárea”, indicó.
Gallegos también expuso que recientemente ha habido una depredación de las nopaleras silvestres para diversos fines, como la ganadería, por lo que advirtió que es necesario que queden fuera de los proyectos energéticos, ya que podrían poner en riesgo algunas especies que aún no están clasificadas.