-Toma de rehenes causó incertidumbre entre la población
-Temían nuevo ataque terrorista; fue un intento de robo
Agencias
París, Francia
Tras la masacre del pasado 13 de noviembre en París, este martes Francia volvió a vivir momentos de incertidumbre, ahora en la ciudad de Roubaix.
Un grupo de asaltantes, en un intento de robo a un banco local, tomó como rehenes al director de la institución, su esposa y sus dos hijos, uno de ellos un bebé de un año de edad, a quienes mantuvieron en cautiverio durante unas tres horas.
Sin embargo, miembros del grupo de élite de la Policía Nacional Francesa (RAID, por sus siglas en francés) desplegaron un operativo en la ciudad de Roubaix, en el norte de Francia, que culminó con el rescate de los rehenes, la muerte de uno de los captores, la detención de otro de los asaltantes y el escape de otro número indeterminado de sujetos.
La Policía descubrió un fusil de asalto Kalashnikov en el departamento en el que se produjo la toma de rehenes; de acuerdo con el procurador, los asaltantes portaban “armas de gran calibre”.
La Prefectura de Policía local confirmó que “todos los rehenes (liberados) se encuentran en lugar seguro”.
La fuente descartó que la toma de rehenes fuera un acto terrorista o tuviera relación con los ataques del pasado 13 de noviembre en París; empero, no dieron más detalles sobre las circunstancias del operativo.
La Policía Nacional Francesa acordonó el barrio residencial de Roubaix en el que se produjo el asalto y desplegó a numerosos elementos en la zona.
Roubaix es una ciudad industrial del norte de Francia, en las afueras de la ciudad de Lille, cercana a la frontera de Francia con Bélgica.