26 de Noviembre de 2024
Director Editorial Lic. Rafael Melendez | Director General - Dr. Rubén Pabello Rojas

¡Papamanía!  

*En Washington, miles muestran su cariño a Francisco

 

*Discurso, marcado por agenda migratoria

 

Agencias

Washington, EU

 

Miles de personas aclamaron al Papa Francisco durante un breve recorrido que hizo con el papamóvil por algunas calles del centro de Washington, tras ser recibido en la Casa Blanca por el presidente Barack Obama, la única oportunidad para muchos de ver al pontífice en la capital de Estados Unidos, país eminentemente protestante.

Decenas de miles de personas esperaban desde la madrugada en un recinto vallado, protegido por fuertes medidas de seguridad, entre la Avenida Constitución, al sur de la residencia presidencial, y las calles 15 y 17 de la ciudad.

Aunque los asistentes apenas pudieron ver al Papa durante unos segundos durante el recorrido por el centro capitalino, que apenas duró media hora, todos coincidían en que había merecido la pena tanto la espera como el madrugón.

Recibido con vítores, gritos de "Viva el Papa", mucha emoción y fuertes ovaciones, la multitud se dibujaba a los lados de las calles como una alfombra de teléfonos celulares de quienes trataban de inmortalizar el momento a falta del palo selfie tan de moda, prohibido por la organización.

El acceso al recinto se cerró una hora antes de que el pontífice comenzara su recorrido pero, pese la gran expectación, las amplias aceras no comenzaron a llenarse hasta las 9:00 horas, dejando grandes espacios al fondo que permitieron a los asistentes lograr una mejor posición para ver al santo padre.

A falta de cifras oficiales, se esperaban unas 200 mil personas al acto, un momento histórico para el que muchos tuvieron que pedir permiso en el trabajo o cambios de turno, ya que se trató de un día laboral en la capital estadounidense.

Posteriormente, Francisco se reunió con centenares de obispos estadounidenses en la Catedral de San Mateo, instándoles a acoger "sin miedo" a los inmigrantes y les aseguró que éstos enriquecerán tanto al país en general como a la Iglesia católica en concreto.

"La Iglesia estadounidense conoce, como pocas, las esperanzas de los corazones de los migrantes. Desde siempre ha aprendido su lengua, apoyado su causa, integrado sus aportaciones, defendido sus derechos, promovido su búsqueda de prosperidad, mantenido encendida la llama de su fe", recordó.

"Ahora tienen esta larga ola de inmigración latina en muchas de sus Diócesis (...) siento la necesidad de darles las gracias y de animarles", dijo a los obispos reunidos en la Catedral de San Mateo Apóstol.

"En todo caso, sepan que también tienen recursos que compartir. Por tanto, acójanlos sin miedo. Ofrézcanles el calor del amor de Cristo y descifrarán el misterio de su corazón", continuó.

En este mismo tenor se había pronunciado más temprano, durante la ceremonia de bienvenida oficial celebrada en la Casa Blanca.

En el evento, Francisco dijo al presidente Barack Obama que se considera "hijo de una familia de inmigrantes", y que éstos construyeron "en gran medida" este país.

Además, se calificó a sí mismo como "hermano" de Estados Unidos y adelantó que en su intervención de este jueves ante el Congreso, alentará a legisladores y gobernantes a guiar al país "con fidelidad a sus principios”, aludiendo a la política migratoria.

 

Canoniza a Junípero Serra

 

El Papa Francisco proclamó nuevo santo de la Iglesia católica al franciscano español Junípero Serra, fraile del siglo XVIII, fundador de las primeras misiones de California.

El pontífice pronunció en latín la fórmula de canonización y pidió que sea incluido en los libros de los santos de la Iglesia católica, al comienzo de un acto en el Santuario nacional de la Inmaculada Concepción de Washington.

El acto formal comenzó con la petición al Papa por parte del cardenal estadounidense Donald William Wuerl, para que el pontífice proclamara la santidad de Junípero Serra, beatificado por Juan Pablo II el 28 de septiembre de 1988.

Posteriormente se procedió a la lectura de la biografía de Serra y a continuación se pronunció la Letanía de los Santos. El papa pronunció luego la fórmula: "En honor de la Santísima Trinidad (…) después de haber reflexionado largamente e invocado la ayuda divina y escuchando el parecer de muchos de nuestros hermanos obispos, declaramos santo a Junípero Serra".

 

Niña mexicana intercede por indocumentados

 

Sophie Cruz, una niña oaxaqueña de 5 años de edad, besó y abrazó al Papa Francisco, a quien pidió interceder por la legalización de los millones de indocumentados en Estados Unidos.

En el recorrido que realizó el Papa Francisco este miércoles por calles de Washington, la niña, que habla dos idiomas y un dialecto, pudo entregarle una carta y una playera.

En la misiva le pide que interceda para la legalización de 11 millones de indocumentados en este país.

En la emotiva escena, la niña, vestida con un traje típico oaxaqueño de color blanco con tejidos, en principio y delante de las vallas, intentó caminar hacia el papamóvil, pero un guardia de seguridad le impidió el paso.

Una mirada de su papá y unos brazos abiertos del Papa forzaron al guardia de seguridad a enmendar y no sólo llevó a la niña, sino que la cargó para que abrazara al Sumo Pontífice y le diera un beso.

La menor, tras ser bajada por el guardia, reviró y tras recordar su misión, insistió y volteó para entregarle la playera y la carta a Francisco.

Gloria Saucedo, dirigente de la asociación Hermandad Mexicana Trasnacional, compartió que Sophie Cruz es “una niña muy inteligente” ya que habla español, inglés y además mixteco.

“Le entregó una carta con un mensaje en el que le pide que ayude para que se legalice a todos los papás sin documentos que están en Estados Unidos”, compartió.

 

En la camiseta se leía una leyenda de “Papa, rescata a mi papá”, “La legalización es una bendición” y “Todos los niños del mundo tienen derecho a ser felices”.