* El personal uniformado no cuenta con seguro de vida, ni cotizan ante el Infonavit
Juan Carlos Jiménez Benavídez
Después del accidente que sufriera Ricardo Luna Martínez, elemento de la Policía Municipal de Tlapacoyan, autoridades municipales ya se dieron a la tarea de solicitar la documentación correspondiente al personal para corroborar su incorporación al Seguro Social, esto como comúnmente dice el dicho: “Después del niño ahogado, hay que tapar el pozo”.
Aunque si bien es cierto que los uniformados de este municipio siempre han sufrido las carencias, además que tampoco cuentan con un seguro de vida que los ampare en caso de fallecer en el cumplimiento de su deber, por lo que no dejarían ningún recurso económico para sus familias.
Por ello es necesario que alguna autoridad como el IMSS o ISSSTE vigile esta situación para corroborar la correcta incorporación al sistema de seguridad social y que el personal sea registrado con el sueldo correcto y no sea una cotización menor para que los servicios que reciban sean limitados.
Esta situación no es nueva dentro de la administración municipal, en administraciones pasadas se llegó al grado de ser trasladados a otros hospitales debido a que no se habían realizado los pagos obrero-patronales en tiempo y forma, llegando al grado que cada elemento tenía que cubrir sus gastos médicos.
Otra de las carencias del personal es que no cotizan ante el Infonavit, esto debido a que a pesar de que varios elementos ya cuentan con más de 30 años de servicios y no han podido adquirir una vivienda con este tipo de beneficios laborales.
Por otro lado el personal de la policía de Tlapacoyan ha llegado al grado de tener órdenes de evitar hasta el mínimo contacto con los reporteros o representantes de los medios de comunicación, que en caso de que sean sorprendidos brindando algún tipo de información serán sancionados o podrán perder su trabajo.
Esto posiblemente sea para evitar que salga de la corporación alguna información de algún tipo de represión que está sufriendo el personal y por temor a perder el trabajo debido a que las fuentes de empleo son escasas, toda vez que señalan que estas órdenes no son siquiera del comandante de la corporación, solo señalan órdenes superiores.