
La tercera parte de las 88 especies de murciélagos que existen en el estado se encuentra en peligro de extinción, derivado principalmente de la invasión de sus hábitat, alertó el autor del libro "Murciélagos: sombras voladoras nocturnas", Arturo Hernández Huerta.
En entrevista, indicó que Veracruz es uno de los estados con más especies del alado; sin embargo, su permanencia está en riesgo debido a la deforestación de sus hogares e incluso el temor que se le tiene y que lleva a la gente a matarlos.
"Son muy comunes los actos de vandalismo en las escuelas, los queman o los asustas; algunas especies bajan su actividad cuando no hay mucho alimento y si las molestamos hacemos que gasten energía y se pueden debilitar".
Esto no sólo pone en riesgo a este animal, sino a ecosistemas completos, pues a esta especie se le atribuye la restauración de las selvas y el control de insectos en zonas templadas.
"Quien hace la clasificación es la Semarnat y hay varias categorías de riesgo y peligro, pero estamos hablando de una tercera parte. Uno de los servicios más importantes que prestan es la restauración de las selvas".
Al presentar su obra en el Instituto Nacional de Ecología (Inecol), aseguró que hay zonas de Veracruz en donde estos quirópteros están en grave peligro de extinción, especialmente en las zonas tropicales.
Hernández Huerta narró que en un estudio reciente se encontró una especie que migra desde Veracruz hasta el sur de Estados Unidos, que también involucra al desplazamiento de polillas que son especies que afectan a los cultivos.
Por ello, advirtió que hay prácticas del ser humano que vulneran a los murciélagos, como el fracking ya que se acaba con sus hábitats naturales y se les confinan a cada vez menos espacios.
"Con la eliminación de su hábitat se pierden también sus alimentos y sus refugios; llaman la atención algunas partes del estado en donde se tiene la abundancia que se tiene en otras partes del país o del propio estado".