Shuichiro Megata, embajador de Japón, sostuvo que el evento La misión Hasekura, de Sendai a Veracruz, fortalece los lazos de amistad y forja un futuro compartido y más próspero entre ambas naciones
Redacción
Xalapa
En el marco del septuagésimo aniversario de la fundación de la Universidad Veracruzana (UV), la rectora Sara Ladrón de Guevara inauguró formalmente las actividades de La misión Hasekura, de Sendai a Veracruz este lunes 18 de agosto en la Unidad de Servicios Bibliotecarios y de Información (USBI) de la máxima casa de estudios de la entidad.
El evento contó con la presencia de Shuichiro Megata, embajador de Japón en México; Américo Zúñiga Martínez, presidente municipal de Xalapa; y Guillermo Herrera Mendoza, subsecretario de Turismo y representante personal del gobernador Javier Duarte de Ochoa.
“Con las jornadas que hoy inauguramos y que concluirán el próximo 30 de agosto, celebramos 400 años de relaciones entre Japón y México”, puntualizó la Rectora de la UV, quien destacó que hasta el día de hoy ambos países “son un ejemplo no sólo de relaciones comerciales, sino, en general, de relaciones sociales de entendimiento, respeto y cooperación que cubren prácticamente todos los campos del quehacer humano: la educación, la ciencia, la cultura, el arte, el deporte”.
Como celebración de dicho encuentro, la UV preparó un amplio y variado programa que incluye conferencias, exposiciones, talleres, obras de teatro, proyecciones cinematográficas y conciertos. “En estas actividades participarán las comunidades de nuestras facultades de Arquitectura, Idiomas, Letras Españolas, Artes Plásticas y Música”, precisó.
A nombre del gobierno japonés, el embajador Shuichiro Megata resaltó la trascendencia de la misión Hasekura, no sólo por su valor histórico, sino por las relaciones contemporáneas de Japón y México.
El embajador expresó “un profundo agradecimiento a la Universidad Veracruzana, en particular a la señora rectora, por organizar este evento para contribuir al entendimiento y fortalecimiento de nuestros lazos de amistad, hacia un futuro compartido y más próspero”.
Relató la historia de la misión, en la que el navío San Juan Bautista, con una tripulación de 180 hombres comandada por el samurái Tsunenaga Hasekura, zarpó de Sendai en 1613, bajo las órdenes de Masamune Date, señor de Sendai, con la finalidad de solicitar sacerdotes para propagar la religión católica en el país asiático, llegando al puerto de Acapulco en marzo de 1614.
Posteriormente zarpó de San Juan de Ulúa, en junio del mismo año, rumbo a España, visitó Roma y volvió a América, para zarpar rumbo a Japón del puerto de Acapulco en abril de 1618.
“Puedo decir que hoy en día las relaciones bilaterales están en su máximo apogeo histórico, el comercio ha crecido como nunca y actualmente se observa un auge sin precedentes de la inversión japonesa en México”, manifestó.