La mexicana protagoniza ¿Quién mató a Sara? serie de Netflix que estrena su segunda temporada y aborda temas de salud mental
CIUDAD DE MÉXICO.
Para la actriz mexicana Carolina Miranda abrir la conversación acerca de temas como la salud mental en series como ¿Quién mató a Sara?, que protagoniza y que el 19 de mayo estrena su segunda temporada, es fundamental, sobre todo por las repercusiones adicionales del confinamiento por la pandemia por covid-19.
Cerca de mil millones de personas viven con un trastorno mental y 75% de las personas con trastornos mentales, neurológicos y por consumo de sustancias, no recibe ningún tratamiento para su afección en países de ingresos bajos y medios, según datos que publicó la Organización Mundial de la Salud (OMS), en 2020.
Además, la OMS registró que los países gastan en promedio sólo 2% de sus presupuestos sanitarios en salud mental.
Es así que la actriz consideró que hay que hablar más de ello como un asunto prioritario, además del entretenimiento que se ofrece en series como la que encabeza.
“Muy pocas producciones le dan un enfoque a la salud mental, como la ansiedad, la depresión y los trastornos mentales. Hay mucho de lo que hablar sobre ese tema, (pero) mucha desinformación; hay mucha gente fuera que necesita ayuda y a lo mejor no se dan cuenta hasta que están en un problema emocional.
“Se me hace un tema muy interesante de tocar, sobre todo en esta pandemia, en donde muchos nos enfrentamos, incluyéndome, a ansiedades, depresiones o desesperación por el encierro. Damos apertura a este tema para que la gente se sienta incluida, no desde el lado oscuro, como lo maneja ¿Quién mató a Sara?, sino para que empiecen a tomar las riendas de su vida y sepan que es algo muy natural el hablar sobre la salud mental”, expresó Carolina Miranda en entrevista con Excelsior.
La actriz, originaria de Irapuato, Guanajuato, reveló que de manera personal ha sufrido uno de estos trastornos.
“He padecido y tengo actualmente ansiedad, lo tengo diagnosticado, tratado y trabajo sobre eso; ayudo a mucha gente que ha tenido problemas de ansiedad, también, para que sepan más del tema y se traten.
“Como actores siempre necesitamos un sicólogo que esté atrás de nosotros, pues los actores son como los chefs: los chefs tienen que afilar sus cuchillos para poder trabajar y el actor debe afilar sus emociones, porque trabaja desde ahí e interpretar. Así que para estar sanos emocionalmente es necesario tener un sicólogo cerca”,
explicó.
Miranda precisó que ¿Quién mató a Sara? abre la conversación a otros temas como la violencia de género, las familias homoparentales y el vientre subrogado.
“Emocionalmente, como mujer, con todo lo que estamos viviendo acerca de los feminicidios, esta lucha que hay, ser la voz que representa la justicia en esta serie y que no se da por vencida por descubrir lo que realmente pasa es muy bonito y una gran responsabilidad.
“La serie tiene de todo, hay una gran apertura. Se manejan temas como la homosexualidad abiertamente, la inclusión familiar, el alquiler de un vientre; una Elisa, mi personaje, que lucha contra un feminicidio y un papá machista. Abarca muchos temas vigentes en nuestra sociedad y justo eso es lo que nos hace sentirnos orgullosos de interpretar una historia muy cercana a la realidad”, afirmó.
La actriz destacó que el reparto y el equipo de producción están complacidos por la respuesta de la audiencia ante la primera temporada, por lo que esperan que esta segunda les resuelva preguntas acerca de los personajes y la pregunta fundamental que plantea el título de la serie.
Además, en cuanto a su personaje, destacó que Elisa está en busca de la verdad, a pesar de la corrupción que existe dentro de su familia, los Lazcano. A la par, ella está a favor de Alex Guzmán (Manolo Cardona), hermano de Sara, quien fue a prisión 18 años atrás por la muerte de su hermana y quien investiga realmente lo que sucedió.
“Acerca de Elisa, fue muy complicado. En el segundo capítulo de la primera temporada se dan cuenta cómo Elisa le da la espalda a toda su familia; eso lo construimos junto con el director y el escritor. Manejamos a una Elisa bastante fuerte y justa, que busca el camino correcto.
“Alex está muy interesado en saber quién era su hermana, porque la historia inicia 18 años atrás, mucho antes de que Elisa apareciera, así que es una venganza que está planificando, pues se necesita saber lo que pasó. El problema de estos dos personajes, que es bien lindo, es que se enamoran, y en esta segunda temporada los verán en conflicto por todo lo que pasa en sus familias.
“En la grabación intentamos no hacer ninguna gesticulación de más, para no revelar al público secretos, antes de que empiecen a descubrirse. Se discernirán muchas dudas y entenderán más de la historia. Van a disfrutar mucho esta segunda temporada”, concluyó.