MAYTHE MORALES/AVC NOTICIAS
COATZACOALCOS
El dolor por sus hijos ausentes unió este 10 de mayo a decenas de mujeres que salieron a las calles del centro de la ciudad para manifestarse de forma pacífica en exigencia de justicia.
Mediante una marcha que partió de Avenida Zaragoza esquina con Galeana rumbo al parque Independencia, familiares de los desaparecidos recordaron por sexto año consecutivo a las autoridades que se mantienen en la búsqueda de sus seres amados y cuyas carpetas de investigación no muestran ningún tipo de avance.
La emblemática celebración del Día de las Madres, para más de 50 mujeres del “Colectivo Madres en Búsqueda de Belén Gonzales” y “Unidos por Amor a Ti”, se ha transformado en un día de lucha, de denuncia y de protesta.
“Míreme a mí estoy desecha, no tengo nada, ya no tengo nada que perder, si mi único hijo ya no está, no tengo nada que celebrar ahora con este dolor de que no encuentro a mi hijo”, expresó Blanca Estela García Marín, madre de Baruch Grajeda García, sustraído por supuestos elementos policiacos el 11 de julio del 2016 y cuyo cuerpo fue ubicado en una de las fosas clandestinas de la localidad de Arbolillo en Alvarado.
De igual manera, detallaron que en México existen 87 mil personas desaparecidas, según cifras oficiales, al tiempo que revelaron que durante la contingencia sanitaria se sumaron nuevos casos a los colectivos con presencia en la zona sur de Veracruz.
Además de las víctimas de desapariciones forzadas, existen víctimas a manos del crimen organizado, cuyos familiares pagaron grandes cantidades de dinero en un intento de que recuperaran su libertad y pudieran regresar a casa.
“Tristemente tienen ocho años mi esposo y mi hermano que desaparecieron, ha sido una búsqueda muy triste todos estos años, seguimos aquí buscando, seguimos alzando la voz y que las autoridades escuchen y realicen su trabajo, a veces se vuelven expedientes, pero en realidad son vidas, son personas que hace falta en nuestras casas, son hijos, son padres, son hermanos que los necesitamos”, expresó Ángeles Benítez Hernández, cuyos familiares fueron secuestrados y aunque se pagó por su rescate nunca más volvieron a saber de ellos.
En ese sentido, exigieron una búsqueda y no más criminalización de las y los desaparecidos.