Salvador Muñoz
Por favor, no. Si no mal recuerdo, todo empezó con el gobierno federal de Calderón, no sé si de mala leche o no, pero ahí empezó el relajo.
El show de ver a nuestros funcionarios metiéndose a la playa para demostrar que ésta es apta para nuestros visitantes es una burla porque, por un lado, cuando la secretaría de Salud federal se preocupa por los enterococos, al turismo realmente no le importan los entero-cacas y tan así, que cada Semana Santa, ahí tiene atiborrada la playa de personas con un solo deseo: meterse al mar a sabiendas de que en esos momentos, se convierte en el mingitorio público más relevante de las vacaciones…
Así, a ojo de buen cubero, hemos visto pasar a Jon Rementería Sempé en paños menores cuando si de política se tratara, hubiera mandado mejor a “Ainarita”... digo, promoción turística por un lado, y gastronómica por otro… pudo haber “taco de ojo”.
Esa ocasión acompañaron a Jon el entonces secretario de Turismo y hoy frustrado pre-candidato a la alcaldía de Veracruz, Tavo Sousa; así como Orlando Uscanga, quien era funcionario de la secretaría de Salud.
En otra ocasión, hasta Leticia Perlasca, ex de Turismo, se metió con Salvador Manzur… no sean mal pensados, se metió a las aguas de playa Gaviotas.
Imaginen que en esa ocasión entraron a darse un chapuzón Pablo Anaya y Pepín Ruiz, lo que se demuestra que es más fácil meterlos al mar que meterlos a la cárcel…
Y en aras de ir tras la chuleta, creo que en más de dos ocasiones Memo Bouchez, el de la Estancia de Boca, fue comparsa en este show.
Inolvidable cuando un candidato a la gubernatura arribó a la playa Pelícano y junto con el entonces alcalde boqueño Salvador Manzur, se sumergió en las aguas… Javier Duarte.
Pero lo que hoy propone Marco Antonio Núñez López, el Choriqueso, no es de Dios… ya soportamos a Perlasca, Duarte, Manzur, Pepín, Pablo Anaya y demás, pero no crea que es una crítica al físico de los acá citados, no, sino una crítica al show. Insisto: el turista que viene del interior del estado, de Puebla, del otrora DF y demás, poco le importa que la secretaría de Salud diga si está apta o no la playa para echarse un bucito (que no un submarino) en aras de liberar todo el estrés (que no a Keiko)... aquél que llega a Veracruz viene directo a echarse un chapuzón… sin que haya circo de por medio…
¡Ya se supo, ya se supo!
Amigas y amigos de la señora Cecilia de Ochoa Guasti, al enterarse de la penosa situación económica por la que atraviesa, decidieron hacer una "vaquita" para apoyarla y así que designaron a unas personas para hacer la colecta entre los cuates y cuatas del ex Gobernador prófugo. Ahora sí, de acuerdo al sapo fue la pedrada, por eso, cuando pasaron por el diputado Juan Manuel del Castillo y vieron la cantidad que depositó, se sorprendieron o se indignaron... o ambas... el diputado local, quien fue favorecido por el duartismo de manera fortuita, sólo puso 10 mil pesos y el comentario al respecto fue: "Y tanto que lo apoyó Duarte!"
El colado
Hablando de eso, o sea, de El Flaco Juan Manuel del Castillo, bien vale la pena recordar cómo es que llegó a trabajar con Javier Duarte de Ochoa. Cuando Javier Duarte arriba a la subsecretaría de Finanzas, lo acompaña un joven que fungía como su particular pero casi de inmediato, enferma y le pide a Juan Manuel que lo apoye con Duarte. Bastaron unos días para que Del Castillo "se le metiera" a Javier quien ya nunca pidió el regreso de su particular... es decir, no era de la cuadra y se coló.
De "visita" por Polanco
Por cierto, este martes, salieron de Chiapas rumbo a la Ciudad de México la señora Virginia Tubilla, Mónica Macías y José Armando Rodríguez Ayache; ¿a qué? se desconoce aunque se tiene la creencia que puede ser que van a comparecer. Según cuentan, se hospedaron en el Hotel Presidente, en Polanco y dicen las malas lenguas que lo más cercano que tienen allí es una oficina de la PGR.
¿Y la señora Cecilia de Ochoa? Ella se quedó con los nietos... recuerden que jueves cumple años Carolina…
