A un par de meses en que deba darse la elección de candidato a gobernador para el estado de Veracruz, por lo que respecta al Partido Revolucionario Institucional, quienes han recorrido la entidad veracruzana al cobijo de su investidura como legisladores son Héctor y Pepe Yunes, incluso han provocado sendos pronunciamientos de la clase política y empresarial, lo cual ha derivado en alguna polarización en favor o en contra de uno u otro.
Para muchos veracruzanos y analistas políticos, la moneda aún está en el aire, ya que las señales de la cúpula partidista y del propio gobernador Javier duarte de Ochoa, han sido todavía no muy claras y confusas, en ocasiones parecía que estas se inclinaban por Héctor y otras por Pepe, pero al final parece confrontado con ambos.
Sin embargo, no hay que perder de vista que el escenario político es totalmente diferente al de hace seis años, en que un gobernador con todo el oficio político y en la plenitud del “pinche poder”, como lo decía el propio Fidel Herrera Beltrán, era el dueño absoluto de la decisión de quien sería el candidato de su partido y a la postre su sucesor, eso obedecía a que el titular del poder ejecutivo federal Felipe Calderón era de otro partido y su opinión y decisión no era determinante.
Sin duda, quien habrá de tener la última palabra en la designación de candidatos priistas para las 12 gubernaturas que estarán en disputa el próximo año, será el presidente Enrique Peña Nieto. en ese sentido Peña no puede darse el lujo de correr el riesgo de entregar a la oposición un estado clave como es Veracruz , tanto por su lista nominal electoral que es la tercera a nivel nacional, como por su situación y actividades estratégica en materia de hidrocarburos y desarrollo petroquímico. De ahí se desprende, que será un personaje de absoluta confianza del Presidente y su equipo más cercano el que venga a operar por dos años, no solo para la sucesión de Gobernador, si no para el proceso electoral de 2018.
En ese sentido, sale a la palestra el nombre de Tomas Ruíz, un personaje que ha estado presente en la administración pública de los últimos cinco sexenios, desde Salinas de Gortari donde ocupó el cargo de Director General de Banca Múltiple , con Zedillo Procurador Fiscal de la Federación, Subsecretario de Ingresos y fue el primer Presidente del Sistema de Administración Tributaria(SAT) ;con Vicente Fox, fue Director General de BANOBRAS, en el mismo sexenio Diputado Federal vía plurinominal por el PRI, pidiendo licencia para ocupar la Dirección General de la Lotería Nacional; en 2004 renunció al PRI y en 2006 rindió protesta como Presidente Nacional del Partido Nueva Alianza(PANAL), sus más recientes cargos han sido en el gobierno de Veracruz , siendo Secretario de Finanzas y Planeación y actualmente Secretario de Infraestructura y Obras Públicas (SIOP).
E los últimos meses, pareciera que sin hacer mucho ruido, Tomas ha estado apareciendo en diversos puntos del estado de Veracruz, al amparo de sus actividades como Secretario de la SIOP, pero con tintes muy cercanos a lo que es la promoción de su imagen, lo que se puede apreciar a través de espectaculares y en diversos medios impresos y electrónicos.
Esto no es casual, tiene una razón de ser, misma que se origina en las relaciones al más alto nivel político y económico, como es su vínculo con el ex gobernador Miguel Alemán , quien sin duda es un hombre poderosos e influyente en las más altas decisiones del poder político en México.
Pero más allá de esto, está su relación directa con dos de los llamados presidenciables y gente muy ligada al presidente Peña, como son los casos de José Antonio Meade recién nombrado secretario de la SEDESOL y Luis Videgaray Caso, hasta ahora inamovible Secretario de Hacienda y Crédito Público.
Trasciende que quien directamente estaría haciendo la operación de “planchar” como se dice en el argot político a Héctor y Pepe Yunes, sería el propio Peña Nieto, con lo que se estaría allanando el camino a Tomas Ruíz rumbo a la gubernatura de la entidad veracruzana, por el periodo de dos años.
En el caso del Senador Pepe Yunes, se le ha visto muy cercano a Tomas, ya que es frecuente verlo acompañando a este en los arranques de obra a lo largo y ancho de la entidad veracruzana, así como en diversos convivios, lo cual tampoco puede considerarse como casual, ya que esto es una muestra de la excelente relación que existe entre ambos políticos y esto puede ser determinante en el proceso que viene.
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Dicen que en política no hay nada escrito, la definición del candidato priista al gobiernos de Veracruz parece ser el caso, por lo que en los próximos días pudiera cumplirse el vaticinio de la aparición de un “caballo negro” encarnado en Tomas Ruíz, lo que vendría a despejar dudas e iniciar una etapa para tratar se sanar heridas tricolores y cerrar filas.
