Salvador Muñoz
El pasado fin de semana, cuando se lamentaba el deceso de la joven Columba, el portal de Internet Noreste daba a conocer el nombre de una supuesta pandilla de jóvenes llamada Los Porkys, como responsable del homicidio de la quinceañera. La fuente en la que se basaba el medio para dar tal dato, aseguraba que era la misma Fiscalía. Ningún otro periódico daba detalle en torno a este lamentable caso. Horas más tarde, el mismo medio de información, conjurando a la misma fuente, ampliaba su nota dando los nombres de los sospechosos: Enrique Capitaine, Gerardo Rodríguez, Jorge Cotaita y Diego Cruz Alonso.
II
El 9 de mayo, una nota en las redes sociales amargaba más el sentir de una sociedad que ya había hecho suyo un lamento: #MeDuelesVeracruz.
En el Facebook de Maruchi Bravo Pagola aparecía la siguiente nota que entrecomillamos tal como la pusieron: “Tía Maruchi, secuestraron a tu sobrina Ileana, mi mama, yo iba con ella en la camioneta y nos bajaron unas mujeres diciendo que nuestra camioneta era robada, no tenían orden de aprehension ni nada, y a ella la empezaron a jalonear y yo me meti a mi me pego un vato y a ella se la llevaron el una camioneta blanca sin placas con luces como las de los polis encima, y ya fuimos a todos los departamentos de policia y todo y nadie sabe nada, nos habian dicho que habia una orden de presentacion contra ella pero nada, nadie se ha comunicado con nosotros, no han pedido rescate y en caso de que la tuviera la poli no ha hecho ella la llamada que les dan, a mi me quitaron el telefono, a ella el suyo, la cartera y las llaves de la camioneta y no sabemos nada desde las 10 de la mañana, te ruego que en lo que sea que puedas ayudar me eches la mano”.
III
El mismo sábado por la mañana, la Mujer, curiosa como es, buscaba en las redes sociales información de los famosos Porkys y encontró el perfil de Diego Cruz Alonso, uno de los jóvenes que involucraba el periódico Noreste en el homicidio de Columba, quien entre sus últimos comentarios, felicitaba a su padre y pedía ser como él cuando fuera grande.
Por otro lado, en el perfil de Jorge Cotaita, aparece un comentario al respecto:
“Gracias a todos por sus comentarios de confianza y apoyo. Sabemos que nos conocen desde niños y que como ustedes saben, somos familias de confianza y unidas con valores. Crecimos aquí con ustedes y tenemos miles de anécdotas juntos… Desde risas, eventos familiares, hasta apoyo en circunstancias difíciles. Desconocemos las razones por las que algunas personas actúan y las respetamos, no nos concierne juzgar. Al día de hoy hemos aprendido la importancia de ser impecables con nuestras palabras y agradecemos a quienes también ahora lo practican. Y aunque una palabra puede ayudar o dañar muchísimo a una persona, las acciones de toda una vida siempre dicen más.
Una vez más, Muchas Gracias y BENDICIONES PARA TODOS”.
IV
Este domingo se dio a conocer la detención de Ileana Mortera Trolle, como indiciada en el homicidio de Columba Campillo. Para las autoridades, ante las redes sociales, esta mujer pasa de víctima a cómplice de secuestro. Para las redes sociales, ante el señalamiento de la Fiscalía, pasa de víctima ¡a víctima! porque un grueso de estos cibernautas, se quedó con la idea de que los “verdaderos responsables” eran Los Porkys y la detención de Ileana como la de Agni Tonatiuh García Albuerne, además de la mención de otros tres implicados, es “la fabricación de responsables” para liberar de culpa a unos “juniors”.
Tengo algunas dudas respecto al caso de Columba: ¿Quién en la Fiscalía dio el nombre de los cuatro jóvenes porteños como sospechosos de este homicidio? ¿Cuál fue la intención de filtrarlos? ¿Por qué en un medio que circula en el norte de Veracruz?
El proceso contra Ileana Mortera y Tonatiuh García apenas inicia. La Fiscalía tiene la obligación de comprobar los señalamientos y aportar pruebas contra sus indiciados y será un Juez quien determine la culpabilidad de éstos… sea cual fuere el resultado, ocurre un fenómeno extraño en el ánimo de algún sector de la sociedad: Pareciera que se espera que la Fiscalía se equivoque, que sus sospechosos no sean los responsables del crimen de Columba para soslayarse del papel de las autoridades que representan a un Gobierno que cada día que pasa, pierde más credibilidad.
Hay una parte de nuestra sociedad que, al menos se percibe en sus comentarios, no busca justicia para Columba, sino la correcta aplicación de la Ley en los indiciados en su asesinato.
