Gilberto Haaz Diez
*Más vale una palabra a tiempo que cien a destiempo. Camelot
Los comentaristas de fútbol se quejaban de que México jugaría en un frío bajo cero, en temperaturas de seis a ocho grados. Quién los manda. Los inútiles federativos contactaron un juego con Bielorrusia (Antiguamente era conocida como Rusia Blanca, se alejaron de Rusia en 1991, cuando aquella República Socialista se desmembró), que está pegadita a Polonia, muy lejos de Chacaltianguis, en víspera del invierno. Pero qué necesidad, diría Juan Gabriel. Los juegos de preparación sirven para eso, y no hay Mundial a la vista que se juegue bajo cero. Ninguno. Son los inútiles federativos, liderados por el hampón Justino Compéan, Decio de María y el Héctor González Iñarritu, los papás del Piojo, futbolísticamente hablando, que no saben cómo contactar buenos juegos. Holanda fue otra cosa, pero Bielorrusia. Pues abríguense y agárrense de las manos. Termina el juego. El equipo B perdió. No sirvió de mucho el partido, afianza a Raúl Jiménez, anotador de los dos goles mexicanos, para que el Cholo, Diego Simeone, lo alinee en el Atlético de Madrid y deje de tenerlo en la banca. Por lo demás, el Piojo a algunos les dio Next, para el resfriado, porque con Next: adiós a la gripa en un dos por tres.
MAÑANA DE LUNES 17
Enfilo rumbo a Córdoba, el gobernador levantó el estandarte de los Juegos y ha suspendido las clases. Los niños les gritan: ¡Hurra!, las mamás hacen gestos y muecas, quién les cuidará a sus niños, dicen quejosas en la radio, y otra les responde: las escuelas no son guarderías. Es verdad que ser gobernante a veces queda uno como el cuetero. Si las suspenden, ah qué exagerado, y si no y ocurre algo, ah qué despistado. Lo cierto es que los diarios reflejaron que en parte la suspensión era por el Frente Frío número 12, y que por allí aprovecharan para ver los juegos, aunque sea por la tele. Ayer enfilé rumbo a Córdoba. Fui a la Arena Córdoba en busca de unos cinco boletos. Se juega el volibol en esa subsede: Cuba, Venezuela, México, etc. Nada. No encontré ningún boleto. Taquillas agotadas afuera de la Arena Córdoba. Busqué a los revendedores. Ninguno. En el módulo donde dan información platiqué con una chica de buen humor. Me entregó un mapa de Córdoba y me informó que los boletos estaban agotados. La pregunta fue, si estaban agotados por qué se ven las tribunas vacías. Tiene una explicación. Los burros organizadores vendieron los boletos como serie, y el que compra uno tiene derecho a ver los tres o cuatro juegos del día, y como solo van a uno, de preferencia México, los demás están vacíos. Esa es la causa. Taquilla vendida, estadios vacíos. Hasta se parecen a Justino Compéan y Decio de María. Dejé encargado con un mesero de Los Portales, que me comprara los cinco para hoy. Veré si corro con suerte. No corrí con suerte. No había. Pero no claudiquemos, ya habrá para alguno.
MAÑANA DE MARTES 18
Hace frío. 12 grados. Me imagino que Xalapa estará igual. Hace un par de días, situación que se agradece, el Magistrado Presidente del Tribunal Superior de Justicia me llamó para invitarme a su IV Informe de Actividades. Alberto Sosa Hernández seguro entregará buenas cuentas. No pude llegar, pero espero verle pronto y su Beto Silva, el periodista Gustavo Cadena Mathey, seguro me dará los pormenores para platicárselos a mis 71 lectores. Hace no mucho, en un comedero de Xalapa disfrutamos un buen rato, entre una que otra entrada de quesos y un buen filete, conocí al Magistrado Presidente. Alberto se me hizo un ciudadano que cuida y que imparte muy bien la justicia. Atento a sus quehaceres. Culto, hombre que ha leído bien y bastante, hablamos de los libros, de los viajes, de las vivencias que luego aparecen como fantasmas y que le sirven a uno para ir forjando un derrotero de bien, porque si muchos funcionarios fueran como él, seguro que este país no andaría ahora como anda, a los cocolazos, diría Kamalucas, una gente de mi pueblo. Suerte, Magistrado. Pronto platicaremos de nuevo. Veo el Facebook de Anilú Ingram Vallines, la diputada presidenta del Congreso, exhibe la foto del acto sentada a la izquierda. El Magistrado al habla, a su derecha, el otro poder, el gobernador Javier Duarte de Ochoa. Acto solemne, muy republicano.
EL OBISPADO OLVIDADO
Hace un año, cuando la brisa de invierno se cuela por mi ventanita, y oigo sonar, el Papa Francesco, que llegó del fin del mundo al Vaticano, para poner orden en esa Iglesia que tiene dos mil años como la institución más antigua del mundo, una mañana que se levantó medio enojao y triste porque su equipo maleta, el San Lorenzo de Almagro, había sido goleado en el campeonato argentino, dio la orden tajante de que el Obispo de Orizaba, Marcelino Hernández Rodríguez, se cambiara de la Diócesis chayotera a la de Colima, que debe ser pueblo aburrido. Que lo único que lo compara con Orizaba es que tiene un Volcán, que a veces hace erupción y hace apretar aquellito a los colimenses. Desde ese día, en que el Obispado quedó ausente, como la Sede Vacante papal, todos los domingos los fieles que van a misa piden por que llegue un nuevo Obispo, al menos así los hacen rezar los curas que dan misa, vamos todos, a pedir porque llegue el nuevo Obispo, pero algunos de nosotros, que a veces somos agnósticos y no somos tan fieles a ir a misa los domingos, pedimos no por un nuevo Obispo, pedimos y rezamos porque regresen al que se fue, a Marcelino, pan y vino. Porque en el grupo de los Juebebes, donde no se bebe solo se cena, le extrañamos un montón, su buen humor, su palabra de Dios, porque luego enmendaba el camino de algunos diablillos, su preparación y su forma de ver la vida. Además, lo extrañan en las comunidades indígenas, donde solía recorrer esas zonas indígenas y muy marginadas y abandonadas por los gobiernos, que no por Dios. El Señor les ve y les bendice en su pobreza, más en estos días cuando el frío lacera y pega duro en el cuerpo y la piel resiste. Algunos de nosotros, al Santo Niño de Atocha le hemos prendido unas veladoras porque Marcelino regrese. Que vuelva, como dice la canción, que vuelva tan solo una vez, pero que vuelva.
CORREO PARIENTE CRÍTICO
¿Cómo eres Duartista, pariente?, el abucheo a tu góber fue igual de fuerte que el del próximo ex-secretario de gobernación. Saludos. A. Muriedas.
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