ÁNGELES ANELL
XALAPA
Los Comités Escolares de Administración Participativa tienen el compromiso de invertir en mejoras escolares, en caso de ser ganadores de la rifa de la Lotería Nacional de los 20 millones de pesos del avión presidencial, el 15 de septiembre.
El delegado federal de programas sociales en la región, Manuel Huerta Ladrón de Guevara, señaló que al regresar a México inicia un dictamen para determinar el valor de la aeronave acorde con las condiciones e infraestructura actual.
“Una gran historia esto del avión presidencial, la primera y la más importante, la primera para poderlo vender tanto se tienen que hacer mantenimiento y cuidado, en Estados Unidos estaba muy expuesto, es la idea de traerlo al hangar presidencial, estaba a cielo abierto”, señaló.
Los recursos obtenidos como señaló el presidente serán regresados en “obras al servicio del pueblo”.
“Bajo esa premisa un empresario compró 400 mil cachitos de lotería y se los donó al gobierno federal, quien su vez decide transferirlos a los Comités Escolares de Administración Participativa creados en los sistemas de auto administración de la Escuela es Nuestra”, comentó.
El Comité Escolar de Administración Participativa del programa federal en Veracruz La Escuela es Nuestra recibe 36 mil boletos de la lotería del avión presidencial, lo que representa una inversión de 20 millones de pesos en obras para las comunidades.
Los recursos a obtener de la rifa del 15 de septiembre de la Lotería Nacional de México con el premio mayor de 20 millones de pesos permitirán fortalecer el sistema de salud, ante la pandemia de COVID-19
“El dinero en efectivo, no precisamente del avión, sino que cada cachito va a tener un premio de 20 millones de pesos, el premio mayor de la lotería, es mucho dinero el que se está jugando ahí son muchos cachitos y de las ganancias se va a tener dictamen del valor del avión”, señaló.
A través de la Escuela es Nuestra, Veracruz recibe 36 mil boletos de la lotería bajo la premisa de que “el pueblo de México es honesto, será un regalo condicionado a cumplir de manera voluntaria sin otro mecanismo”, salvo la palabra que de ganar regresa el presupuesto a la comunidad.
“Ellos que ya han manejado cantidades importantes de recursos públicos se les transfiere, pero con la condición de firmar un acta donde de ganarse ellos el premio de lotería no va a ser para ellos, sino que lo van a transferir para las comunidades donde viven para sus propias escuelas”, agregó.
La Escuela es Nuestra destina desde 150 a medio millón de pesos a obras prioritarias establecidas en asamblea por un comité integrado por la comunidad, erige obras acorde con las carencias emergentes y sanitarias.
Esta asamblea establece las prioridades en obras de construcción, cada uno rinde cuentas acorde al manejo de los recursos que incluye la asesoría técnica.