Juan David Castilla Arcos
Xalapa
Al menos seis librerías de Xalapa han cerrado sus puertas de manera definitiva en los últimos cinco años.
La situación de estos establecimientos es muy complicada.
Los libros no son vistos como una necesidad primordial y, por ello, las ventas han sido bajas en comparación con otros años.
Elizabeth Bonilla ha laborado durante años en diversas librerías. Ahora es encargada de Rayuela, ubicada en la calle Mata, esquina Xalapeños Ilustres, en el Centro Histórico de la ciudad.
Ella ha constatado el cierre definitivo de este tipo de negocios.
“Tengo muchos años en librerías y he visto abrir muchas, cerrar abrir otras y seguir cerrando. En los últimos años yo he visto cerrar como seis librerías, como en los últimos cinco años”.
A su parecer, la crisis económica que enfrenta el país ha recrudecido la situación financiera de las librerías.
“La crisis económica en el país ha sido fuerte, no nada más es en el estado, venimos cargando un gobierno muy problemático desde hace muchos años. No hay un incremento en la economía”.
Rayuela ha registrado pérdidas económicas del 30%.
La Reforma Educativa ha contribuido a la crisis financiera que enfrentan estos negocios en la capital del estado.
“Con la nueva reforma educativa ya no están exigiendo tanto lo libros, ya no son tan necesarios, aunque algunos maestros todavía están solicitando algunos libros de lectura”.
Anteriormente, los libros eran considerados “obligatorios” para distintas asignaturas y niveles educativos.
“Los padres de familia venían a comprarlos, pero este año ha disminuido eso, porque las escuelas ya no tienen permitido pedir tantos libros”, relata Elizabeth Bonilla.
DESPIDEN PERSONAL
Libreros de Xalapa registraron pérdidas de más del 50%, en comparación con años anteriores.
De acuerdo con Carmen Yadira Monzón Juárez, encargada de la librería Nueva Era, el problema se agravó en los últimos dos o tres años.
“Esto se debe a la economía porque para comprar un libro nuevo de 299 pesos o más caro, le piensan”.
Coincide en que algunas librerías han cerrado sus puertas y que, en algunos casos, han tenido que despedir personal para garantizar su permanencia en el mercado.
Estos establecimientos han tenido serios problemas para cubrir los pagos de renta y cubrir los servicios básicos, como agua y luz.
Además, la gente prefiere comprar libros de segunda mano, porque son más económicos.
Algunas librerías han tenido que rematar textos con descuentos del 50 por ciento y, en ocasiones, ni así se venden.
La librería Nueva Era tiene ofertas del 30 y 50 por ciento, en busca de un repunte en ventas.
Cabe recordar que cada 21 de septiembre se conmemora el Día de los Libreros Independientes.
AMAZON, EL PEOR ENEMIGO
Amazon es una compañía estadounidense de comercio electrónico y servicios de computación en la nube a todos los niveles, con sede en la ciudad estadounidense de Seattle, Washington, Estados Unidos.
A juicio de Monzón Juárez, esta empresa ha perjudicado a los libreros independientes.
“Amazon no está dando y los libros digitales igual”.
Nueva Era utiliza una estrategia para mejorar en ventas, llamada “cita a ciegas entre libros y lectores”.
Decenas de libros forrados con papel de estraza se observan en un mostrador.
“Arriésgate a descubrir un libro sin conocer su título. ¡Participa y enamórate!”, se lee en el forro.
La población xalapeña tiene una cultura para la compra de libros impresos.
Así lo ha considerado el cronista de la ciudad Vicente Espino Jara.
Incluso, menciona que es elevado el número de librerías que hay en la capital del estado.
“Si en el resto del país no se lee, qué hay indicadores, habría que revisar, en Xalapa, por fortuna, es el caso inverso, hay lectores. No podríamos tener la cantidad de librerías que tiene Xalapa, si no hubiera una sociedad habida de lectura”.
A su juicio, hay más de 12 librerías de ocasión con temas y obras que destacan a nivel nacional.
Indicó que el hábito por la lectura es notorio, independientemente de que gran parte de los textos son adquiridos por el sector universitario.
FALTAN INDICADORES
Integrantes del Grupo de Libreros de Xalapa han propuesto que los ayuntamientos realicen un estudio para tener una percepción más objetiva sobre el número de personas que leen.
De acuerdo con el librero de Xalapa, Héctor Gabriel Reyes Mora, en la actualidad no existen indicadores confiables sobre la percepción de la lectura como un hábito en la población.
A su juicio, no es creíble que los mexicanos lean solo dos libros al año, toda vez que en las ferias del libro existe una gran presencia de todas las edades y todos los niveles económicos.
“Nada más que aquí la pregunta sería: ¿se vende libro?, sí, ¿se lee?, ahí entramos en un tema un poco confuso, porque se puede comprar un libro para leerse u obsequiarse”.
Añadió que los estudios de lectura no solo deberían ser realizados por la Cámara de la Industria Editorial en México, sino también por autoridades municipales.
“Aquí tendríamos que partir más de diagnósticos de lectura más sectorizados, más regionales, más municipales, podría ser una tarea que podríamos echar a andar”.
En ese sentido, comentó que podrían involucrarse las áreas municipales de cultura.
Y es que los libreros han dicho estar dispuestos a laborar de manera conjunta con los municipios para garantizar que existan indicadores y se conozca cuántas personas leen.