* Juan Javier Gómez Cazarín logró respaldo de MORENA, MC-PRD y PRI-PVEM para acabar con la ineficiacia y red de complicidades del Fiscal.
Xalapa, Ver. , 03 de Septiembre 2019.- En maniobra sorpresiva, el diputado Juan Javier Gómez Cazarín, en su calidad de presidente de la Junta de Coordinación Política del Congreso de Veracruz, tumbó al fiscal yunista, Jorge Winckler Ortiz.
En sesión de la Diputación Permanente, el legislador de Hueyapan de Ocampo, Juan Javier Gómez Cazarín presentó un punto de acuerdo para aplicar la separación temporal del fiscal Jorge Winckler Ortiz, quien desde su nombramiento como titular de la dependencia estatal, a finales de 2016, debió cumplir con los lineamientos del Sistema Nacional de Seguridad Pública, como sujetarse a los procesos de evaluación y certificación.
Desde el momento en que asumió el cargo y hasta esta fecha, Jorge Winckler Ortiz se ha negado cumplir con este proceso, por lo que incumple con lo establecido en la Ley para la permanencia de los funcionarios encargados de la procuración de la justicia y la seguridad pública en Veracruz y a nivel nacional.
Al detectarse esta anomalía, el coordinador de la bancada de Morena en el Congreso local, propuso como medida preventiva la separación del Fiscal, con el respaldo de los coordinadores de los grupos legislativos MC-PRD, en voz de Brianda Kristel Hernández Topete, y PRI-PVEM, a través de la diputada Ericka Ayala.
Al leerse la solicitud, se estableció que Jorge Winckler no cumple con lo dispuesto en el artículo 21 de la Constitución Federal, que establece que ningún funcionario podrá permanecer en las instituciones de seguridad pública sin haber sido certificada y registrada en el sistema correspondiente, además, el artículo 123 aparado b fracción 13ava, la reforma en cita establece que los agentes del Ministerio Público, los peritos y miembros de las instituciones policiales de la federación, entidades federativas y municipales podrán ser removidos si no cumplen con los requisitos que las leyes vigentes en el momento del acto señalen para permanecer en dichas instituciones o removidos por incurrir en irresponsabilidad en el desempeño de su funciones.
“El 30 de diciembre de 2016, Jorge Winckler fue nombrado Fiscal General del Estado, y desde su nombramiento no ha cumplido con la disposición constitucional señalada de conformidad con los informes rendidos por las autoridades competentes a esta soberanía.
“Durante el ejercicio de la función del titular de la fiscalía, han surgido lamentables hechos ilícitos de naturaleza penal, respecto de los cuales los cuerpos de seguridad pública estatal y federal han detenido a presuntos criminales que quedan liberados por ausencia de carpetas de investigación y en algunos casos por falta de órdenes de aprensión, lo que pone en duda si la Fiscalía General está cumpliendo con el sentido de la reforma del 18 de junio de 2018, lo anterior porque la sociedad veracruzana debe tener la certeza y seguridad de que el titular de la función del Ministerio Público Estatal se somete al esquema de evaluaciones, certificaciones, revalidaciones y registros que obedecen al interés público superior que tutela no sólo derechos en lo individual sinop también aquel en índole colectivo, cuya observancia es condición para la realización del resto de los derechos fundamentales de la sociedad veracruzana”, expresó el diputado Alexis Ayala, al leer el escrito de la Junta de Coordinación Política.
Ante este anuncio, la legisladora panista María Josefina Gamboa, quien llegó tarde a la sesión, en su calidad de diputada suplente, intentó a toda costa reventar la sesión e impedir la votación para la separación temporal de su incondicional abogado personal, Jorge Winckler, no obstante, sus gritos, manotazos y enfrentamiento verbal con legisladoras de Morena, no impidieron que se votara a favor y se le rindiera protesta a la nueva Fiscal General, Verónica Hernández, consumándose así la destitución del yunista, Jorge Winckler.
La partida la ganó Cazarín, quien se había comprometido ante la sociedad veracruzana a quitar al fiscal, herencia del yunismo, por los resultados tan pobres para procurar la justicia y contribuir a la construcción de la paz en Veracruz.