Coatzacoalcos, Ver.- (AVC) La inseguridad en Coatzacoalcos no disminuyó con la implementación -durante un año- del operativo de seguridad instruido por el titular de la Secretaría de Gobernación (SEGOB), Miguel Ángel Osorio Chong, sino por el contrario, la situación recrudeció y como consecuencia decenas de familias han estado de luto, sin justicia.
Un recuento de los boletines hemerográficos del Observatorio Ciudadano de Coatzacoalcos (OCC) de cuenta de un total de 118 homicidios dolosos y 44 secuestros en el puerto durante los primeros nueve meses del 2017.
La llegada de Osorio Chong a esta ciudad, el 17 de octubre del 2016, tuvo como precedente una cifra histórica de más de 50 secuestros en menos de un año así como una cifra similar de ejecuciones en el puerto y la solicitud de autoridades municipales así como empresarios, durante los últimos días de Javier Duarte de Ochoa al frente del Gobierno de Veracruz, de la intervención de la Federación.
Hasta el cierre de agosto de este año, el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP) registró 58 homicidios dolosos cometidos con arma blanca, de fuego y otros objetos en este municipio.
Incluso, el Instituto Nacional de Estadística Geografía e Informática (Inegi) reveló esta semana que Coatzacoalcos fue considerada por la población como la segunda ciudad más insegura del país, solamente detrás de Villahermosa.
Hace un año, Miguel Ángel Osorio Chong anunció que la Marina encabezaría el combate a la delincuencia en esta ciudad. Destacó el apoyo de un grupo especializado de la Comisión Nacional de Seguridad (CNS) e instituciones como la Procuraduría General de la República (PGR), la Policía Federal y el Ejército.
Sin embargo, las fuerzas de seguridad no han podido frenar la ola delictiva y tanto las ejecuciones como los secuestros y robos son parte de la vida cotidiana en el municipio, en el que está ubicada una de las Zonas Económicas Especiales (ZEE).
Por su parte, ni la PGR ni la Fiscalía General del Estado (FGE) han logrado el esclarecimiento o la detención siquiera de los responsables de la escandalosa cifra de delitos de alto impacto, pues si bien han sido detenidas algunas bandas de secuestradores hay cientos de homicidios y plagios en la impunidad.
A diferencia de lo que ocurrió hace un año, las autoridades locales y la cúpula empresarial no han lanzado desplegados ni declaraciones en medios nacionales para volver a llamar la atención de las autoridades.
Salvo algunas excepciones, los únicos reclamos han sido por parte de la población en redes sociales así como en los cementerios de la localidad.