Juan David Castilla. Xalapa, Ver. El cuerpo de Yolanda González Cano quedó tendido sobre la avenida Lázaro Cárdenas.
Perdió tres dientes, estaba inconsciente. Había Intentado impedir que su amiga Nora Gómez Hernández fuese agredida por su novio. A ella le tocó la golpiza.
Era la madrugada del pasado martes 19 de septiembre. La joven de 27 años había alcanzado a su excompañera de trabajo, quien terminaba de cenar en un restaurante con su pareja sentimental José Miguel Hernández Ortega, jefe de Planificación Familiar en el Hospital Regional "Luis F. Nachón".
Ambas se conocieron en el Congreso del Estado. Yolanda laboraba en el Centro de Estudios por la Igualdad de Género y Derechos Humanos, y Nora en otra área. Mantenían una relación cercana.
Esa noche habían acordado reunirse. Entre pláticas y "chistoretes", el tiempo pasó rápido. Era tarde y Yolanda no debía irse sola a casa por la inseguridad. En unas horas debía viajar a la ciudad de Puebla y participar en un congreso de mediación. Tenía que descansar. Nora le ofreció un "aventón".
El médico conducía. De pronto, comenzó a discutir con su chica. Se puso violento. González Cano pidió que se detuviera para que ella pudiera abordar un taxi. Él accedió. Se detuvo frente a Plaza Crystal.
Las mujeres fueron las primeras en bajar del vehículo. Sabían que algo andaba muy mal. El funcionario del gobierno de Miguel Ángel Yunes Linares corrió hacia Nora.
-Tú no te vas a ningún lugar-, le dijo. En segundos, la sometió. Ella estaba de rodillas en el piso y parecía no poder defenderse.
-Por favor, ¡detente!-, suplicó Yolanda al agresor, pero fue ignorada.
Ella levantó su mano derecha y un taxista se acercó. Mientras tanto, José Miguel arrastraba y jaloneaba a su novia para treparla al coche contra su voluntad.
"Como pude se lo quité de encima, subí a mi amiga al taxi, cuando yo me iba a subir al taxi arrancó. Lo que Nora dice es que él (médico) venía armado, saca la pistola, el taxista la ve y huye", narra.
Yolanda quedó sobre la solitaria y oscura carrera; vulnerable a una agresión. Nadie podía verla.
INCAPACIDAD POLICIACA
El sujeto la derribó con brutalidad. Tendida en el suelo, sentía los golpes en su cabeza. Según Nora, el servidor público la agarró a patadas hasta que la noqueó.
Desquitó su ira con dos mujeres. Se sentía fuerte como un león en su manada. Pero no había nadie más de su peso y tamaño que lo enfrentara.
Yolanda despertó sobre la avenida mencionada, la de mayor circulación vehicular en Xalapa. Tenía golpes en todo cuerpo, sobre todo en la cara.
"Todo por decirle a un sujeto violento, que trabaja para gobierno del estado, que no era la manera, y por defender a alguien, a una mujer indefensa, a mí me lo hicieron".
Una patrulla de la Policía Estatal arribó al lugar de los hechos. Los elementos exhibieron su falta de capacidad para atender ese tipo de casos.
"Me dejaron ahí sola a la voluntad de cualquier otra persona que me pudiera hacer daño, ellos huyeron (policías)", repudia la víctima.
Los servidores públicos iban a bordo de la patrulla número SP-3008, con placas de circulación 00-61-22. También los paramédicos de la Cruz Roja, la dejaron a la deriva.
Horas después, personal de la Fiscalía General del Estado (FGE) también "se la hizo cansada" en el proceso para interponer la denuncia correspondiente.
"Me traían de una fiscalía a otra, porque cuando vamos a la Fiscalía General me dicen que ellos no son los encargados de levantar la denuncia, entonces me remiten a la fiscalía especializada".
Yolanda González Cano pudo presentar la denuncia en la Fiscalía Séptima Especializada en la Investigación de Delitos de Violencia contra la Familia, Mujeres, Niñas, Niños y Trata de Personas, contra Hernández Ortega por los presuntos delitos de lesiones y omisión de auxilio.
Por lo que se abrió la carpeta número 2053 con el oficio de investigación UIP/1/DX1FE SEPTIMA/2053/2017.
La agraviada también emitió un oficio al titular de la Secretaría de Salud, Arturo Irán Suárez Villa, y al Mandatario estatal, para exigirles que su caso no quedara en la impunidad.
Y es que en la entidad es común que las mujeres son violentadas, golpeadas, torturadas y hasta asesinadas, y nadie es castigado.
Yolanda es una de las cuatro mujeres que son víctimas de violencia al día en Veracruz.
120 VÍCTIMAS AL MES
De acuerdo con la directora del Instituto Veracruzano de la Defensoría Pública (Invedep), Rosalba Rodríguez Rodríguez, la violencia contra las mujeres ha crecido de manera generalizada en la entidad.
Dicha dependencia atiende de 100 a 120 casos al mes por violencia intrafamiliar, donde, mayormente, las mujeres son golpeadas y lastimadas.
La especialista ha detectado siete municipios como focos rojos: Acayucan, Coatzacoalcos, Minatitlán, Xalapa, Veracruz, Orizaba y Poza Rica.
Lugares donde se registra el mayor número de feminicidios y casos de violencia intrafamiliar.
"El sur de Veracruz es la zona donde más ha aumentado la violencia contra las mujeres, pasó de dos a cinco muertes al mes y es algo complicado", comenta Rosalba Rodríguez.
Tan sólo en Xalapa han sido contabilizados más de cinco feminicidios por parte de la Defensoría Pública, durante este año.
La funcionaria admite que la declaratoria de la Alerta de Violencia de Género para 11 municipios, en noviembre pasado, no ha permitido erradicar el problema.
A su juicio, este gobierno panista "heredó" el problema y aunque se trabaja en su erradicación esto no ha sido posible.
"El maltrato a mujeres desafortunadamente ha aumentado y los casos de feminicidios en el estado son la mayor prueba. Ya se está trabajando en ello", añade.
OPACIDAD GUBERNAMENTAL
La activista Olivia Aguilar Dorantes revela que los derechos humanos de las mujeres continúan siendo pisoteados en el estado.
Para la representante legal de la asociación civil Salud y Género, las cifras no paran. Continúan en aumento los abusos contra las mujeres.
El estudio bajo la tutela de la Facultad de Antropología de la Universidad Veracruzana (UV) -que es coordinado por la académica Estela Casados González- revela que más mujeres han sido víctimas de homicidios dolosos, desapariciones forzadas y otras agresiones, en comparación con años anteriores.
El reporte a principios del mes de septiembre arroja 169 asesinatos en la entidad, en lo que va del año; 527 reportes de violencia y 166 desapariciones.
“Hay alerta decretada pero los datos y las cifras siguen aumentando. ¿Cuál es la cuestión ahí?, pues se hizo la participación de la ciudadanía, pero el gobierno sigue sin responder”.
La feminista ha denunciado varias veces que el gobernador Miguel Ángel Yunes Linares se niega a reconocer el problema y a acatar la Alerta de Violencia de Género.
Declaratoria emitida por la Secretaría de Gobernación (Segob) para los municipios de Boca del Río, Coatzacoalcos, Córdoba, Las Choapas, Martínez de la Torre, Minatitlán, Orizaba, Poza Rica de Hidalgo, Tuxpan, Veracruz y Xalapa.
Organizaciones civiles mantienen una estrecha comunicación para diagnosticar e intentar detectar los casos de violencia contra mujeres.
Información que posteriormente han trasmitido a las autoridades estatales en mesas de diálogo. Pero pareciera no importarles.
Y es que en próximos días, en octubre, sería decretada la segunda alerta de violencia de género para el Estado de Veracruz.
En esta ocasión, por el agravio comparado, luego de que el Congreso local no aprobara las modificaciones para ampliar las causales y garantizar la interrupción legal de embarazo.
Para ellas, urgen mecanismos que obliguen a la sociedad a respetar sus derechos.