Juan David Castilla. Xalapa, Ver. Los familiares derramaban lágrimas mientras el féretro de Mara Fernanda Castilla Miranda se acercaba. Los montículos de tierra yacían a sus pies.
Tristeza, rabia e impotencia se percibía en el panteón Bosques del Recuerdo de Xalapa, donde le darían el último adiós.
Eran cerca de las 12 y media del día. El Sol arreciaba. Las gotas de sudor escurrían en los rostros de los presentes. Las sombrillas y carpas eran insuficientes.
La joven de 19 años: una víctima más de los incesantes feminicidios registrados en el país.
"Nos mataron a Mara, también nos mataron a nosotros", exclamaban sus familiares entre las lápidas.
Rezos. Llantos. Todos exhibían su dolor por la pérdida. Algunos guardaban sus lágrimas. Su enojo era notorio.
Alumnos de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP), compañeros de Mara, estrechaban sus manos. Se abrazaban. Necesitaban fortaleza.
Cursaron año y medio de la Licenciatura en Ciencias Políticas con ella. Convivieron. Conocieron sus defectos y atributos. Compartieron.
El Padre Nuestro y el Ave María acompañaban la ceremonia. Las oraciones se reproducían de boca en boca.
Las guitarras acompañaban a los cantos religiosos. Decenas de personas observaban el hoyo que había sido cavado horas antes.
Sus parientes y amigos colocaban las coronas. El llanto era incesante.
La universitaria, originaria se Xalapa, Veracruz, fue hallada muerta durante el Día de la Independencia de México, tras ocho días desparecida. Presentaba indicios de estrangulamiento, golpes severos y violación sexual.
La última vez que se le vio con vida fue cerca de las cinco horas del 8 de septiembre cuando abordó un taxi Cabify para llegar a su casa, luego de asistir a un antro en Cholula, Puebla, con sus amigos.
96 Normal 0 21 false false false ES-TRAD X-NONE X-NONE /* Style Definitions */ table.MsoNormalTable {mso-style-name:"Tabla normal"; mso-tstyle-rowband-size:0; mso-tstyle-colband-size:0; mso-style-noshow:yes; mso-style-priority:99; mso-style-parent:""; mso-padding-alt:0cm 5.4pt 0cm 5.4pt; mso-para-margin:0cm; mso-para-margin-bottom:.0001pt; mso-pagination:widow-orphan; font-size:12.0pt; font-family:Calibri; mso-ascii-font-family:Calibri; mso-ascii-theme-font:minor-latin; mso-hansi-font-family:Calibri; mso-hansi-theme-font:minor-latin; mso-fareast-language:EN-US;}
Ahora, el reclamo de justicia se escucha a nivel nacional e internacional.