Juan David Castilla. Xalapa, Ver. La ex vocera del duartismo, María Georgina Domínguez Colío, consideró que las denuncias en su contra son parte de una estrategia electoral, aun cuando podría ser cómplice de los delitos cometidos por el exgobernador Javier Duarte de Ochoa.
La presidenta de la Fundación Colosio aseguró que sus cuentas están en regla y carecen de observaciones; sin embargo, éstas sólo fueron auditadas por el gobierno para el que trabajaba, mediante el Órgano de Fiscalización Superior (ORFIS) y la Contraloría General del Estado, considerados un elefante blanco por el desfalco financiero registrado en el pasado sexenio priista.
"Mira, la verdad es que todo forma parte de un escenario que estamos viviendo y que todos lo vemos, yo solo quiero hacer una precisión, sobre todo en el tema de comunicación social, sobre todo porque entre tantas cosas que se dicen, se confunden. salí hace tres años de la dirección general de comunicación social, y cuando estuve al frente todas mis cuentas públicas fueron aprobadas, no tuve ninguna observación ni de la Contraloría, ni del Orfis, en la materia de ejercicio de recursos”.
En las instalaciones del Partido Revolucionario Institucional (PRI), la encargada de la comunicación social de Duarte destacó que en la dependencia sólo ejercía su presupuesto operativo y "no tenía dinero para nada más".
"Sólo era un gestor para el pago y la relación con los medios de comunicación, en el tema de las empresas fantasmas que se ha manejado de manera recurrente en la dirección de comunicación social, lo que yo conozco, lo que yo vi documentado en medios de comunicación es que todo se hizo a finales del 2014, entre agosto y diciembre del 2014, de acuerdo a lo que he visto documentado".
Sin embargo, fue notorio su enriquecimiento durante el tiempo que estuvo al servicio del entonces Gobernador de Veracruz, ahora prófugo de la justicia.
La entrevistada negó haber efectuado pagos a empresas fantasmas y haber cometido irregularidades durante su gestión.
"En esas fechas, yo ya no estaba, sé también que se habla de que hubo pagos en 2012 y 2013, si los hubo no lo sé, pero lo que sí puedo asegurar es que Comunicación Social no realizó pago alguno a empresas fantasma, eso no lo sé, solo lo he visto en algunos medios de comunicación”.
Gina Domínguez fue criticada por medios independientes, periodistas y activistas por el control que ejerció sobre la prensa oficialista para mantener una buena imagen de Duarte.
El medio de comunicación Sin Embargo público el 20 de febrero de 2014, que ella manejó la publicidad gubernamental como un recurso para mantener a raya a medios de comunicación.
"Lo primero que tengo que hacer es que los temas particulares se atiendan en las instancia que corresponden, porque no se debe litigar o hacer escándalos en los medios, yo estoy tranquila trabajando aquí, se ha dicho que me fui a Estados Unidos y no sé a dónde más, pero eso no es cierto, y dicen que estoy vendiendo casas y pues primero tendría que compararlas para después venderlas", comentó la priista.
El pasado 9 de enero, el abogado Tomás Mundo Arriaza declaró a medios de comunicación que Gina Domínguez planeaba su huida del país, toda vez que estaba rematando sus bienes inmuebles.
Por ello, pidió a la Fiscalía General del Estado (FGE) gestionar las medidas cautelares necesarias para evitarlo.
Y es que su ex jefe, Duarte de Ochoa, es acusado de enriquecimiento ilícito y vínculos con la delincuencia organizada, y buscado por la Procuraduría General de la República (PGR) y la Organización Internacional de Policía Criminal (Interpol), pero aún no ha sido localizado.