Juan David Castilla. Xalapa, Ver. La Fiscalía de Veracruz está dando largas para evitar una denuncia penal por parte de los extrabajadores del Icatver, que fueron "levantados" la madrugada del jueves pasado.
Alrededor de las tres de la mañana, dos mujeres y cuatro varones fueron sustraídos de Plaza Sebastián Lerdo de Tejada, donde permanecían en plantón.
Más de 15 policías estatales arribaron en tres patrullas y se los llevaron al cuartel San José, sin mostrar una orden de aprehensión.
De acuerdo con María Elena Alonso Guerrero, una de los afectados, relató que sus derechos constitucionales fueron violentados por la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), a cargo de Jaime Téllez Marie.
"Sabemos que ellos no lo hacen así porque sí, tienen un superior, entonces recibieron órdenes de su Secretario (de Seguridad Pública) o del mismo gobernador (Miguel Ángel Yunes Linares). Nos privaron de la libertad sin tener culpabilidad. Vinieron contra nosotros con todo, como si fuéramos delincuentes".
Los policías argumentaron que estaban haciendo sus necesidades fisiológicas en la plaza pública, situación que era mentira.
Para salir de los separos, les exigieron 300 pesos, correspondientes a la cuota por una falta administrativa.
Sin embargo, los hicieron dejar sus huellas dactilares y les tomaron fotografías con teléfonos celulares cuando estaban en el sanitario de sus celdas.
También los tuvieron incomunicados en el cuartel y por ello sus familiares entraron en pánico, toda vez que no sabían nada de ellos.
Los quejosos reanudaron su protesta en Plaza Sebastián Lerdo de Tejada para exigir su reinstalación y el pago de salarios caídos, pues fueron despedidos injustificadamente con el cambio de gobierno.
Presentarán una denuncian en la Fiscalía General del Estado (FGE), a cargo de Jorge Winckler Ortiz, y una queja en la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH), que preside Namiko Matzumoto Benítez.