Yhadira Paredes. Xalapa, Ver. El gobernador Miguel Ángel Yunes Linares, afirmó que se actuará con todo el peso de la ley en contra de quienes desde la madrugada del jueves cerraron las válvulas de la presa Yuribia dejando sin vital líquido a casi medio millón de habitantes de ella zona sur del estado, donde están involucrados, acusó integrantes de Morena, entre ellos el delegado en la zona Sur, Eloy Gonzalez Bautista y la diputada local Rocío Pérez Pérez.
En conferencia de prensa, el mandatario indicó también que se han iniciado 66 procedimientos administrativos para la cancelación de concesiones de taxistas o transportistas otorgados por el gobierno del estado que han participado en los bloqueos en la entidad.
Yunes Linares se comprometió con los habitantes de Coatzacoalcos, Minatitlán y Cosoleacaque a resolver el problema y aplicar la ley en contra de quienes provocaron el cierre del agua y no permitir más el chantaje y extorsión al gobierno estatal.
Recordó que quienes encabezan este movimiento han recibido casi 2.5 millones de pesos mensuales a través de su dirigente Lino González Bautista, es decir, casi 60 millones de pesos en los últimos dos años en efectivo.
“El convenio que suscribieron las autoridades del gobierno con los dirigentes, es el más claro ejemplo de que no se respetó la ley, no hubo estado de derechos, por el contrario se negocio y se llegó al convenio de no tomar medidas penales”.
Recordó que dicho convenio fue suscrito el 28 de noviembre del 2015 por el entonces procurador de justicia, Luis Ángel Bravo Contreras, secretario de Gobierno, Erick Lagos Hernández y de Finanzas Mauricio Audirac, incluso por la ex diputada local Anilú Ingram Vallines como presidenta del Congreso del Estado.
El mandatario veracruzano afirmó que no cederán al chantaje porque el agua es de todos los veracruzanos y no de unos cuantos, toda vez que la presa es propiedad del Gobierno del Estado y suministra agua a más de 500 mil habitantes de la zona sur.
Advirtió que durante el mes de diciembre convocaron al diálogo con los representantes del grupo y dejaron en claro que no darían dinero en efectivo pero se desarrollarían programas de atención social, infraestructura, caminos, apoyo alimentario a quienes lo requieran.
“Lo que no podemos ni debemos hacer es desviar recursos a un grupo que hace uso del chantaje como arma. Si para mantener el orden debo correr riesgos, los correré pero no permitiré someter al gobierno que representa a 8 millones de veracruzanos”, afirmó.
Yunes Linares indicó que tras el cierre de las válvulas dejó de abastecerse agua a los habitantes de tres municipios importantes en el sur del estado, lo que implica poner en riesgo a la población ademas de afectar servicios básicos, como es de cuidado de salud pues se quedaran sin agua hospitales y clínicas de la zona.