Yhadira Paredes. Xalapa, Ver.- Luego de dos días de especulaciones la noche de este lunes el fiscal general del Estado, Luis Ángel Bravo Contreras anunció que presentó ante la mesa directiva del Congreso local su renuncia con carácter de irrevocable al cargo.
Dicha renuncia surtirá efecto, dijo, a partir del 1 de diciembre, es decir, el próximo jueves, a fin de que Veracruz pueda transitar a mejores esquemas de gobernabilidad, paz social y bienestar para sus ciudadanos.
Bravo Contreras afirmó que son momentos de acuerdos por lo que no será factor de división ni encono, ya que lo que Veracruz necesita hoy más que nunca es unidad.
“Sólo en esa medida, como el gran pueblo que somos, podremos salir adelante de la grave situación por la que atraviesa nuestro Estado”, afirmó.
Además el ahora ex abogado estatal, quien habría sido elegido por un periodo de nueve años, afirmó que justificaba su renuncia en haber llegado al cargo por decisión del Congreso del Estado durante una administración que ahora es duramente criticada y cuestionada.
“Sustento la justificación de la presente renuncia, en haber llegado a este cargo por decisión del Honorable Congreso del Estado, durante una administración encabezada por un gobernador (Javier Duarte de Ochoa) que hoy es severamente cuestionado”
Ante ello, dijo, debo facilitar a esta nueva Legislatura y a la administración entrante, tomar las decisiones que consideren más responsables en bien de la siempre inacabada y perfectible procuración de justicia.
En su mensaje ante los medios de comunicación reconoció el liderazgo de Miguel Ángel Yunes Linares y confió en que se iniciará una nueva etapa que requiere de la suma de todas las voluntades para que Veracruz recupere la grandeza que nunca debió perder, y que yo en lo personal busco contribuir con este acto.
Bravo Contreras sostuvo que se retira con un balance certero de la fortaleza de la institución y pidió a quienes se quedan en la FGE a no bajar la guardia en el único compromiso de respetar y hacer respetar la ley.
A 34 meses de haber tomado las riendas, primero de la Procuraduría General de Justicia y después Fiscalía General se dijo satisfecho.
“En materia de procuración de justicia, no hay labor concluida, pero como en todos los aspectos de la vida, existen ciclos que nos permiten dar lo mejor de nosotros mismos, y al agotarlos, dejar que el esfuerzo continúe con servidores públicos que lleguen con renovados bríos y con nuevas estrategias que den los resultados que la sociedad exige día a día”.