Redacción. Xalapa, Ver. A dos semanas de que concluya la presente administración estatal, catalogada como la más desastrosa en la historia de Veracruz, la solicitud de Javier Duarte de Ochoa para regresar a la gubernatura es una burla para los veracruzanos.
Se trata de una “tragicomedia” con diferentes escenas, donde los más afectados son los ciudadanos, que no logran apropiarse de sus instituciones públicas ni de la democracia, opinó el investigador de la Universidad Veracruzana (UV), Rafael Arias Hernández.
“Son novelas en las cuales el personaje principal es un hombre o una mujer que sobrepasa todos los límites, empezando por los del derecho, y convierte todo en una tragicomedia en la que a veces se ríe pero la mayor parte se sufre y se sacrifica”, sostuvo.
El lunes, en el Congreso del Estado fue presentado un documento con la firma del gobernador prófugo, donde pide regresar al cargo para el que fue electo y que debería de ocupar hasta el 30 de noviembre. En la misma carta, señala que hará frente a las acusaciones en su contra, porque “este entramado obedece a razones que resultan ajenas al Derecho, lo que también plantearé y probaré en el debido oportuno momento”.
El pleno del Congreso del Estado de Veracruz dio entrada a dicha solicitud, con el fin de revocar su licencia y concluir su periodo constitucional. En la lectura de la correspondencia, la Secretaria de la Mesa Directiva turnó el documento a la Secretaria General de ese poder.
El economista y columnista consideró que la ciudadanía se encuentra inectiva y dejando a la clase política las acciones de gobernanza en el estado de Veracruz, cuando ellos deberían asumir el control.
“Ahí vamos de novela en novela, de tragicomedia en tragicomedia, porque los ciudadanos no asumimos la responsabilidad de gobernar al gobierno. Estamos esperando que nos llegue del cielo, de la sangre azul o aristocrática el control del gobierno”, declaró.
Arias Hernández consideró que la carta se debe a que al poder llegó una persona que no estaba preparada con otros intereses muy diferentes a los de servir a la sociedad.
“Por eso van de las ocurrencias a las improvisaciones, a las exageraciones y a la impertinencia. El puesto es de representación pública no le pertenece a una persona ni familia”, añadió el académico.
Cabe recordar que después de la sorpresa que ocasionó entre los nuevos diputados la llegada de la carta, se investigó quién la presentó y a través de videos se pudo conocer que la persona que la llevó es primo de Karime Macías de Duarte, esposa del gobernador prófugo.
En ese sentido, mencionó que desconoce el entramado psicológico ni intención real de Javier Duarte de Ochoa al presentar dicha carta en la Legislatura de Veracruz y después hacerse público.