TUXTLA GUTIÉRREZ, Chis. EL UNIVERSAL. El gobernador de Chiapas, Manuel Velasco Coello, condenó las agresiones que sufrieron docentes el miércoles en Comitán de Domínguez, y aseguró que los hechos no quedarán impunes.
Aseguró que la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) "tiene la instrucción de profundizar las pesquisas para ir por todos los responsables de esta atrocidad".
Y afirmó que el líder de la organización responsable de las vejaciones a los profesores detenido "enfrentará la justicia y se le aplicará todo el peso de la ley".
El gobierno del estado, sostuvo el mandatario en un comunicado, actuará con decisión y firmeza contra quienes realicen actos como los de Comitán de Domínguez.
En contraparte, Velasco Coello señaló que los maestros agraviados reciben asistencia legal y protección del gobierno para evitar represalias en su contra.
De igual manera instruyó que la Secretaría estatal de Educación que les proporcione atención necesaria y se refuerce la comunicación con las escuelas para atender denuncias por presiones y amenazas a maestros que acuden a las aulas a impartir clases.
Velasco Coello reprobó de manera tajante las agresiones a los docentes, cometidas por "integrantes de la Organización Popular Independiente Emiliano Zapata (OPIEZ) quienes retuvieron a trabajadoras y trabajadores de la educación, los hicieron caminar descalzos, les colgaron cartelones acusándolos de "traidores a la patria" y los raparon por no apoyar el paro magisterial".
Sostuvo que su gobierno es respetuoso del derecho a la manifestación, pero que las protestas deben salvaguardar la dignidad y los derechos de terceros.
Se trata, puntualizó, de "apostarle" en todo momento al diálogo y a la paz para que "no triunfe el discurso del odio y la división".