Las autoridades federales, entre ellos elementos de la Gendarmería Nacional, abandonarán la búsqueda de indicios de los cuatro jóvenes de Playa Vicente que desde el 11 de enero están desaparecidos, luego de que una patrulla de la secretaría de Seguridad Pública estatal los detuvieran.
El 24 de enero a las 09:00 de la mañana, arribaron a Tierra Blanca un contingente de 400 elementos de la Gendarmería Nacional para buscar a los cinco jóvenes desparecidos, de los cuales fueron encontrados restos de Bernardo Benítez Arroniz, pero aún falta por localizar a José Benítez de la O, Susana Tapia Garibo, Mario Arturo Sánchez y Alfredo González Díaz.
Durante la tarde –noche del jueves, en la Ciudad de México se reunieron los padres y madres de familia de estos jóvenes, con el subsecretario de Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación, Roberto Campa Cifrián.
En esta cita, las autoridades federales dijeron a los padres y madres de familia, que en los últimos cuatro meses la Gendarmería buscó indicios en cuatro ranchos, entre estos El Limón, donde se encontraron restos de Bernardo Benítez Arroniz, pero no hay más que buscar.
El padre de familia, Bernardo Benitez Herrera expresó que cuando escucharon estas palabras sintieron tristeza, porque significa que la búsqueda se detiene y ahora sólo les queda que continúen la investigación la Fiscalía General del Estado y la Procuraduría General de la República.
Esta investigación se basará en las declaraciones que ofrezcan los policías y civiles detenidos, que participaron en el presunto delito de la desaparición de los cinco jóvenes.
“La verdad sentimos desencanto, tristeza y algo muy, muy, muy feo, pero también debemos aceptar que si ya no hay formar de encontrar más indicios, tenemos que aceptar la situación y avocarnos a la investigación para tratar de atrapar a todos los autores materiales e intelectuales”, dijo.