Residentes en las zonas de Siria controladas por el gobierno de Damasco están llamados a las urnas el miércoles para elegir a un nuevo Parlamento de 250 miembros, en unos comicios que se espera sean un trámite para el presidente, Bashar Assad.
La gente empezó a acudir a los centros electorales poco después de su apertura a las 7 de la mañana. Unos 3 mil 500 candidatos aprobados por el gobierno competían por los escaños, después de que más de otros 7.000 quedaran fuera de las listas.
El Dato
- Assad y su esposa, Asma, votaron a primera hora del miércoles en la Biblioteca Assad de Damasco. El presidente no ofreció declaraciones.
El ministro sirio de Exteriores, Walid al-Moallem, tras hacer lo propio, dijo a reporteros: "En Siria siempre decimos que el pueblo sirio decide su destino y hoy están demostrando de forma práctica la exactitud de este dicho".
Siria renueva su Parlamento cada cuatro años y Damasco afirma que la votación es constitucional y se celebra por separado de las conversaciones de paz en Ginebra dirigidas a poner fin a una guerra que dura más de cinco años.
Pero la oposición alega que contribuye a crear un clima poco favorable a las negociaciones, en medio de intensos combates que amenazan un cada vez más tenue alto el fuego mediado por Estados Unidos y Rusia.
Líderes occidentales y miembros de la oposición han tachado el proceso de farsa y afirmado que es una provocación que socava las negociaciones en Ginebra.
En la capital Siria, Damasco, votantes dijeron estar totalmente a favor de que se celebren los comicios cuando corresponde.
"Me siento muy orgulloso hoy porque las elecciones son un deber nacional y democrático y todo ciudadano honesto debe ejercerlo", declaró Wahid Chahine, un empleado gubernamental de 54 años, tras depositar su voto en la ciudad.
La votación es constitucional y no debería demorarse, a pesar de que varios millones de sirios no podrán participar, agregó.
"Espero que en las próximas elecciones todos los sirios puedan votar y Siria esté libre de todos los terroristas", añadió.
Marah Hammoud, una estudiante de periodismo de 21 años de la ciudad de Homs, en el centro del país, dice que es importante en este momento que el pueblo pueda elegir a sus representantes.
"Queremos representantes electos que se preocupen por la gente, que puedan ayudar a poner fin a esta guerra y controlar los precios", explica. "Vivimos con esta esperanza".
Militares votarán
Las elecciones, en las que los soldados podrán votar por primera vez en la historia, se celebrarán solo en territorios controlados por el gobierno.
Se han habilitado centros de votación en 12 de las 14 provincias sirias. Raqa, en el norte del país, está controlada por el grupo extremista Estado Islámico, e Idlib, en el noroeste, está en manos del Frente Nusra, la filial de Al Qaeda en el país, y otras facciones insurgentes. El gobierno no tiene presencia en ninguna de las dos regiones.
Los centros cerrarán a las 19:00 (1600 GMT), pero si la participación es alta podría demorarse el cierre. Los resultados se esperan para el jueves.
En Turquía, una agencia de noticias reportó que proyectiles disparados desde suelo sirio alcanzaron una ciudad del sur del país, en el cuarto incidente transfronterizo de este tipo en menos de una semana.
Según la agencia de noticias privada Dogan, los proyectiles impactaron en dos zonas del centro de la ciudad de Kilis el miércoles por la mañana desatando el pánico. Alcanzaron un terreno vacío y no dejaron víctimas, agregó. La policía se desplegó en los puntos atacados. El ejército turco responde automáticamente a los cohetes o proyectiles que llegan a suelo turco de acuerdo con su protocolo de combate.