La célula terrorista que perpetró los atentados contra Bruselas y París estuvo dirigida en todo momento por miembros del Estado Islámico (EI) en Siria, según pudieron confirmar las autoridades belgas a través de archivos encontrados en una computadora que perteneció a Brahim el Bakaraui, uno de los suicidas del aeropuerto.
Las investigaciones apuntan a que el verdadero objetivo de los terroristas era la Eurocopa de fútbol, que tendrá lugar en Francia en junio próximo.
Los dos mayores atentados que ha sufrido la Unión Europea en los últimos meses fueron realizados por miembros de una célula terrorista denominada Batallón de la muerte del que se cree Abdelhamid Abaaoud, yihadista abatido tras el 13-N en París, era el cerebro intelectual y organizador de las misiones.
Salah Abdeslam, radical que huyó tras la masacre en el Bataclan y quien fue aprehendido cuatro días antes de los atentados en Bruselas, así como los terroristas identificados hasta el momento, estaban bajo las ordenes de Abaaoud. Muchos de ellos fueron radicalizados en Molenbeek, un barrio belga de mayoría musulmana. Las indagatorias señalaron que los yihadistas viajaron a Siria entre 2013 y 2014 y luego retornaron a Europa dado que poseían nacionalidad belga o francesa.
Las policía había detectado a varios de ellos por delitos menores como robo o tráfico de drogas.
El Batallón de la muerte, creado en un campamento oculto de Siria o Irak, está formado por cerca de cien miembros, su objetivo principal es realizar misiones en el exterior dispuestos a intervenir para afiliar a nuevos yihadistas.
Expertos consideran que en el Viejo Continente existe un millar de potenciales terroristas, quienes ofrecen su vida en nombre de la yihad (Guerra Santa) pero que carecen del entrenamiento que los cien principales miembros recibieron de Abaaoud.
Las fuerzas de seguridad europeas han admitido que se enfrentan a un enemigo singular, integrado por individuos que preparan meticulosamente sus acciones siguiendo cánones establecidos por otras agrupaciones criminales como la ETA (País Vasco y Libertad).
En el ordenador de Brahim el Bakaraui, se detectaron varios planes para cometer atentados en los próximos meses.
La lucha contra el terrorismo ha puesto en jaque a las autoridades belgas quienes han sido tachadas de ineficientes. Incluso el conglomerado político y burocrático, noble defensor del garantismo jurídico, pero muy complejo a la hora de pactar decisiones ha quedado rebasado por una situación que se torna cada vez más compleja .
El sueño nacido tras el horror de la Segunda Guerra Mundial, que representó la Unión Europea, apenas respira bajo el fuego cruzado del sentimiento antieuropeísta y el castigo electoral a quienes, como la canciller alemana Angela Merkel, reivindican los valores fundacionales de la Unión Europea pero la avalancha de refugiados de la Guerra Siria ha puesto en jaque al continente.