23 de Noviembre de 2024
Director Editorial Lic. Rafael Melendez | Director General - Dr. Rubén Pabello Rojas

Bajan previsión del PIB mexicano por entorno global débil

Debido a la fragilidad en la recuperación de las economías desarrolladas y un comportamiento menos favorable para las economías emergentes, el grupo financiero BBVA Bancomer y los especialistas encuestados por el Banco de México (Banxico), redujeron su estimado de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) para 2016.

Por un lado, Bancomer pasó de un pronóstico de 2.6 a un 2.2 por ciento en 2016; y estima que podría llegar a 2.6 por ciento en el 2017. Para la inflación, prevé que cierre en torno al 3 por ciento anual, en medio de un ambiente global que impone fragilidad a los países desarrollados y un comportamiento menos favorable para las economías emergentes.

En el mismo sentido, los analistas del Banco de México ajustaron a la baja su expectativa por segunda ocasión en el año, de un 2.69 por ciento previsto en enero a un 2.45 por ciento calculado en la encuesta de febrero.

También, los analistas recortaron su estimación para el próximo año, de un 3.18 por ciento a un 2.98 por ciento.

Mientras que para la inflación, los especialistas sondeados por el banco central llevaron al alza su pronóstico, de 3.34 por ciento para todo el año, desde un 3.10 por ciento de la encuesta previa.

Los especialistas consideraron que los factores que podrían obstaculizar el crecimiento económico del país en los próximos meses, de acuerdo con los especialistas cuestionados por el banco central, son la debilidad del mercado externo y la economía mundial, la inestabilidad financiera internacional, el precio de exportación del crudo (Mezcla Mexicana) y la plataforma de la producción petrolera.

Para Bancomer, el menor ritmo de crecimiento, el más bajo desde la crisis de 2009, responde principalmente a dos factores: primero, la frágil recuperación de las economías desarrolladas, cuyo dinamismo se ha visto influido por el impacto de la desaceleración del comercio mundial y por el efecto de la inestabilidad financiera sobre la producción industrial, las decisiones de inversión y el gasto en consumo; segundo, el deterioro de la demanda en el bloque de economías emergentes.

Para el grupo financiero, el recorte de Hacienda al gasto público por unos 132 mil millones de pesos y el alza de tasas de interés de referencia a 3.75 por ciento son dos medidas que ayudarán a reducir la especulación de los mercados internacionales con el peso, por lo que el tipo de cambio que pronostican para finales de 2016 es de 17.2 pesos por dólar.

“En conjunto, las medidas anunciadas son positivas porque aumentan el costo y el riesgo de especular contra el peso, lo que debería abonar a disminuir las presiones que se observaron en meses recientes. No obstante, no se espera que por sí mismas aprecien el peso pues para ello se requieren mejoras en fundamentales y en la situación financiera de Pemex”, señaló.

Finalmente, para el primer y segundo trimestres de 2016, la mayoría de los especialistas consultados espera que la tasa de fondeo interbancario se mantenga en 3.75 por ciento, para que a partir del tercer trimestre de 2016, la tasa esté por encima del nivel actual.