
La resistencia por evitar la construcción de una hidroeléctrica en Jalcomulco sigue, éste miércoles se cumplieron dos años y los pobladores de la región pretenden continuar.
Anexado al calendario escolar desde preescolar hasta secundaria, los habitantes de Tuzamapan, Jalcomulco y Llano Grande se reunieron para expresar versos de aliento y una misa.
Desde las siete de la mañana, Josafat Rodríguez Téllez, organizador de las guardias del grupo “Cuates del Río”, acudió a su cambio de turno para iniciar los preparativos de la misa eucarística que se ofició a pie de la carretera que conduce a la cabecera municipal de Jalcomulco.
Él es uno de los cientos de habitantes que siguen en la lucha, alternando sus actividades diarias destinadas a la guía de turistas o pesca por una resistencia a la llegada de Odebretch.
“El río me da todo y lo hago por los chiquillos, nosotros nos vamos a ir, ellos y la naturaleza se quedan”.