Irán retiene a 10 elementos de la Marina estadounidense y sus dos pequeñas embarcaciones que ingresaron a aguas iraníes tras navegar a la deriva por problemas mecánicos.
Las autoridades iraníes acusaron a los marineros de invasión, pero funcionarios estadounidenses indicaron que Teherán ha asegurado que la tripulación y las naves serían devueltas en breve y a salvo.
“Los dos botes han sido capturados por las fuerzas navales de la Guardia Revolucionaria cerca de la isla Farsi, adentrándose dos kilómetros en aguas territoriales de Irán”, ha indicado, por su parte, la agencia de noticias iraní Fars.
Se espera que los marineros sean entregados a las autoridades de Estados Unidos hoy por la mañana.
El portavoz del Pentágono, Peter Cook, declaró que los botes se trasladaban entre Kuwait y Bahréin cuando Estados Unidos perdió contacto con ellos.
Servidores públicos estadounidenses dijeron que el incidente ocurrió cerca de la Isla Farsi, situada en medio del Golfo Pérsico.
Señalaron que se originó a partir de algún tipo de problema mecánico con una de las embarcaciones, lo que ocasionó que quedaran varadas.
Los marineros están detenidos en una base de Irán en la isla Farsi.
“Hemos estado en contacto con Irán y hemos recibido garantías de que la tripulación y los buques serán devueltos con prontitud”, afirmó Cook.
El secretario de Estado John Kerry, quien ha forjado una relación personal con el ministro iraní de Relaciones Exteriores Mohammed Javad Zarif a través de tres años de negociaciones nucleares, llamó inmediatamente por teléfono a éste tras enterarse del incidente, según un funcionario estadounidense de alto rango.
Kerry “se involucró personalmente con Zarif sobre este asunto para tratar de llegar a este resultado”, señaló el funcionario.
Kerry se enteró del incidente alrededor de las 12:30 de la tarde hora del este de Estados Unidos, mientras él y el secretario de la Defensa, Ash Carter, estaban reunidos con sus homólogos filipinos en el Departamento de Estado, agregó el estadounidense.
Los funcionarios solicitaron no ser identificados porque no estaban autorizados a hablar públicamente sobre el delicado incidente.
Esto ocurre después de un incidente registrado en diciembre cuando Irán realizó una prueba de cohete cerca de barcos de guerra y embarcaciones de Estados Unidos que pasaban a través del Estrecho de Ormuz.
“Estamos al tanto de las circunstancias. Estamos trabajando en ello y esperamos que se resuelva la situación”, explicó el asesor de seguridad nacional de la Casa Blanca, Ben Rodhes.
En marzo de 2007, la Armada iraní capturó a 15 militares británicos de la Royal Navy mientras llevaban a cabo una misión cerca de las costas de Irak.
La administración de Teherán detalló entonces que la embarcación se había adentrado en sus aguas jurisdiccionales y finalmente fueron liberados tras estar dos semanas detenidos.
Por su parte, el consejero de Seguridad Nacional de la Casa Blanca Ben Rhodes ha dicho, de acuerdo con la agencia de noticias Reuters, que el Gobierno de Barack Obama confía en que la situación se resuelva pronto.
De acuerdo con una de las fuentes de NBC, las autoridades iraníes han entendido que se trata de un error y se han comprometido a liberar a los dos buques y a su tripulación —nueve hombres y una mujer estadounidenses— en las próximas horas.
Las relaciones entre Washington y Teherán han mejorado notoriamente a partir del acuerdo alcanzado entre Irán y las potencias mundiales para limitar el desarrollo militar del programa nuclear del régimen de los ayatolás a cambio del fin de las sanciones internacionales.
Irán despliega misiles por sanciones de EU
El presidente de Irán, Hasán Rohaní, ordenó al Ministerio de Defensa ampliar y mejorar el programa de misiles de su país, en respuesta a los planes de Estados Unidos para imponer nuevas sanciones a Teherán.
“Dado que el gobierno de Estados Unidos claramente está siguiendo aún sus políticas hostiles y su injerencia ilegal, las fuerzas armadas necesitan aumentar de forma rápida y significativa su capacidad de misiles”, dijo Rohaní el pasado 31 de diciembre.
Rohaní ordenó a su ministro de Defensa, Hossein Dehghan, aumentar los esfuerzos para mejorar la capacidad de los misiles, tras reivindicar el derecho de Teherán a desarrollar misiles mientras no estén diseñados para portar armas nucleares, según la televisión Press TV.
Las nuevas sanciones serían en respuesta a los dos lanzamientos de misiles balísticos efectuados este año por Irán, uno en octubre y otro en noviembre pasados que, conforme al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, violan las resoluciones sobre la materia.