El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, acusó hoy a Donald Trump de explotar el resentimiento de segmentos de la población más afectados por la crisis financiera para impulsar su campaña hacia la nominación presidencial republicana.
En una entrevista radial difundida este lunes, Obama dijo que la habilidad de Trump para inyectar un discurso divisivo y extremo para generar adherentes ha sido también resultado del cambio demográfico del país y del “estrés” económico derivado de la crisis.
Esta situación ha afectado a los salarios de la clase media, “que han tenido muchas dificultades en esta situación económica” y que ya no pueden proveer a sus familias con un solo empleo.
Al combinar esas circunstancias “se ve una rabia, una frustración, un miedo potencial. Parte de ello está justificado, pero no está bien dirigido. Y creo que alguien como Trump se está aprovechando de ello”, dijo el mandatario.
Las declaraciones de Obama se dan ante la persistencia de Trump en las preferencias electorales, pese a sus declaraciones y propuestas que han sido consideradas ofensivas en algunos segmentos de la sociedad estadounidense.
Las recientes propuestas de Trump para prohibir el ingreso a los musulmanes a Estados Unidos le ganaron el repudio de una mayoría de los estadunidenses, pero no le significó pérdida de terreno entre los republicanos.
La más reciente encuesta dada a conocer este lunes por la cadena Fox lo colocó con 39 por ciento de las preferencias entre esos electores, una diferencia de 21 puntos sobre su más cercano contrincante, el senador por Texas, Ted Cruz.