*Académicos, investigadores y representantes de la sociedad llaman a dejar la apatía para lograr una democracia participativa
*Participan en mesa de análisis "La democracia en la batalla electoral 2016", convocada por El Heraldo de Xalapa
Naldy Rodríguez
Xalapa
Para sacar a “flote” a Veracruz, se requiere la participación activa de todos los actores políticos y ciudadanos, “que todos dejen de ganar un poco”, para que la batalla electoral 2016 genere un mejor escenario social y un proyecto conjunto de nación.
Ante el proceso electoral para renovar la gubernatura y el Congreso local, especialistas en democracia y política coincidieron en que la ciudadanía puede aprovechar el momento histórico para hacer un gran pacto que evite que el barco se hunda más y toque fondo.
La población hasta ahora se ha quedado "pasmada” y "apática", mientras que las autoridades han fallado en el cumplimiento de las promesas y atención de las necesidades básicas de la sociedad, junto a otros factores —como la corrupción— que han generado una crisis profunda de todo el régimen político en México y en Veracruz, coincidieron.
En la mesa de análisis "La democracia en la batalla electoral 2016", convocada por El Heraldo de Xalapa, académicos, investigadores y representantes de asociaciones civiles discutieron sobre la crisis de los partidos políticos, la participación ciudadana y el papel del OPLE y el INE en los próximos comicios.
Moderados por el director general de esta casa editorial, Rubén Pabello Rojas, externaron que hay una desconfianza ciudadana, pero por actos de corrupción que tienen nombres y apellidos; pero que también ha permeado en la sociedad.
“Parece que estamos en el momento más profundo de una crisis de régimen, hay incredulidad en las instituciones, hay que ver hasta donde más está el fondo... Es un momento realmente de descomposición, lo nuevo no acaba de llegar y lo viejo sigue con sus defectos”, destacó el director del Centro de Investigaciones de Estudios Superiores en Antropología Social (Ciesas), unidad Golfo, Ernesto Isunza.
Aunque el escenario es desolador, los invitados coincidieron en que se puede avanzar hacia una democracia participativa, en lugar de representativa, en la que se involucren todos los actores sociales.
“La visión fatalista es parte de la necesidad de todos. Es el reto y motor de mantener vivos, pero somos una sociedad distinta que ha avanzado, pero todavía hay retos que debemos enfrentar unidos, seguir sumando”, consideró la catedrática de la Universidad Veracruzana en Filosofía del Derecho, Marily Viveros Ramírez.
Como parte del diálogo, el presidente de la Asociación Filosofía, Cultura y Artes de Veracruz, Arturo Jaramillo Palomino, consideró que el sistema político es inteligente y audaz, pero perverso; mientras que la ciudadanía se mantiene “pasmada” sin involucrarse realmente en la solución de problemas.
“La reforma electoral de dos años, que el OPLE está sin presupuesto, es una infantilada, cuando hay inquietudes de la ciudadanía y lo que sufren. Todo va al 2018, la gente está asqueada”, lamentó.
La respuesta, continuó la académica e investigadora del Colegio de Veracruz (Colver), Lidia Castro Gaínza, es que como ciudadanos primero buscamos resolver las necesidades de primera necesidad, por eso todos están descontentos, saben que algo falla, pero no hacen nada.
“Creo que su hay descontento, todos sabemos lo que está fallando, pero nadie hace nada. Cada quien en su camino va en la búsqueda de atender sus necesidades primarias”, evidenció.
Participación ciudadana responsable
En el actual escenario para el proceso electoral 2016, podría registrarse una baja participación ciudadana, pero también una sociedad encontrada y enfrentada, coincidieron todos los especialistas.
“La ciudadanía esta pasmada, indiferente, insensible, la mayoría de la ciudadanía tiene temor... Sí existe una gran mayoría de ciudadanos, pero no hay movimiento, no existe una sensibilidad a lo que estamos sufriendo todos los mexicanos en cualquier área”, consideró Jaramillo Palomino, quien es integrante de la Suprema Logia Masónica.
Incluso, el investigador del Ciesas Golfo manifestó que podría ser menor al 40% de los votantes, pero aún faltan variables y factores que podrían influir.
Es el caso de la designación de los candidatos, dijo Castro Gaínza, quien recordó que la ciudadanía ya no vota tanto por los partidos políticos sino por los personajes, por eso han podido surgir candidatos independientes.
Lo deseable es que se registrara una participación ciudadana responsable, activa y comprometida, pero lo más probable es que se registre una baja afluencia en las urnas por la apatía, cansancio y hartazgo de la población, advirtió Viveros Ramírez.
El panorama
La situación social y democrática es compleja, porque se quieren resolverlo temas del siglo XXI con el sistema del siglo XIX, y hasta el día de hoy el modelo de democracia representativa no ha funcionado, consideró la catedrática de la Facultad de Derecho de la máxima casa de estudios.
“Queremos seguir resolviendo con democracia representativa y ahora ya tenemos las posibilidades de llegar a un modelo de democracia participativa… Ahí a lo mejor se puede sectorizar por demandas y necesidades”, comentó.
La realidad es que se ha dejado a la ciudadanía fuera de la jugada y se ha empeorado a las instituciones, señaló Ernesto Isunza, quien consideró que se debe mirar a países que enfrentaron problemáticas similares para salir a flote.
Puso como ejemplo el caso de Brasil y Colombia: ambos países apostaron por un ministerio público autónomo y que la Contraloría social no sería parte de gobierno, apostaron por descentralizar.
“Los que pensamos diferente hemos perdido la batalla... Falta acuerdo de salvar el país, que todos dejan de ganar de manera ilegítima”, enfatizó.
OPLE Veracruz, con voto de confianza
El nuevo Organismo Público Local Electoral (OPLE) en Veracruz debe tener un voto de confianza, aunque ya empezaron a destacarse los problemas que van a tener por falta de recurso, consideró la investigadora del Colver, Linda Castro.
“Como primer ejercicio dársele un voto de confianza, y generar la estructura básica de este proceso, bajo un clima de transparencia”, dijo y recordó que fue necesario sustituir el IEV, pues era ya una institución muy desgastada.
Marily Viveros coincidió en que sería absurdo, una tomada de pelo y un desgaste que el Instituto Nacional Electoral (INE) llegara a tomar el control de la elección local, en la que se elegirá al próximo gobernador y al Congreso del Estado por un periodo de dos años.
“Deben de permitirle operar y funcionar. Generar sus propios errores y desarrollar sus fortalezas, todas las instituciones están construidas por personas que se pueden mejorar”, añadió en el tema.
A pesar del voto de confianza que dieron las mujeres, el director del Ciesas-Golfo consideró que el organismo que está completamente desacreditado es el INE, y no por las personas que lo integran, sino por los actos de autoridad que ha realizado.
“Tienen un progresivo desencanto, todas las encuestas muestras que están llegando al nivel más bajo de descrédito”, dijo y consideró que en términos superiores de proteger el derecho de los veracruzanos, no tendría ningún empacho en que tomen en sus manos el proceso un organismo jurisdiccional superior.
“No es fundamental que el OPLE organice la elección tampoco, por encima está el voto de los veracruzanos, que se emita con seguridad y se cuenten los votos”, advirtió.
En ese mismo sentido opinó Jaramillo Palomino, quien señalo que solo se forman nuevas instituciones para recuperar la confianza ciudadana, “la credibilidad total no existe, así bajen a la Virgen María”.
El choque de trenes
Para el investigador y director del Ciesas-Golfo, el PRI está en una grave situación de cara al proceso electoral del próximo año, pero el PAN y el PRD, con la alianza que se vislumbra, tampoco presenta una alternativa para la ciudadanía.
Los tres partidos, dijo, tendrán un “choque de trenes” con los resortes tradicionales que han permitido tener el poder en el estado de Veracruz, pero en esta ocasión el escenario podría ser diferente:
“Los resortes que movilizan a estas dos grandes opciones políticas están ante un grave predicamento porque para utilizar esos resortes, necesitas mucho dinero, es una inversión que en dos años será imposible de recuperar”.
En ese complicado escenario para las dos principales maquinarias políticas, agregó, hay un tercer factor que podría incidir en los resultados de la siguiente elección: el partido Morena que ha logrado posicionarse rápidamente entre el electorado.