EL UNIVERSAL
CIUDAD DE MÉXICO
Lori Vallow, conocida como la "mamá del fin del mundo", fue condenada este lunes a cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional por la muerte de sus dos hijos y la de la anterior esposa de su marido, un caso que atrajo la atención de todo Estados Unidos tras la desaparición de los niños, hace casi cuatro años.
Vallow fue condenada en mayo por los asesinatos de sus hijos, Joshua "JJ" Vallow, de 7 años, y Tylee Ryan, de 16, así como por conspiración para cometer asesinato, por la muerte de Tammy Daybell, en Idaho. Antes de ser sentenciada, la mujer se dirigió al tribunal y alegó que una experiencia cercana a la muerte le permitió comunicarse con el "mundo de los espíritus", señaló el medio NBC News.
Vallow dijo al juez que sabía "a ciencia cierta" que sus hijos, al igual que Tammy Daybell, eran felices en el cielo, porque se han comunicado con ella. "Jesús me conoce y Jesús me entiende", dijo. "Estoy de luto con todos los que lloran a mis hijos y a Tammy. Jesucristo conoce la verdad de lo que ocurrió aquí, Jesucristo sabe que nadie fue asesinado en este caso. Las muertes accidentales ocurren, los suicidios ocurren, los efectos secundarios fatales de los medicamentos ocurren", indicó, de acuerdo con la cadena estadounidense. Tylee era hija biológica de Lori, pero Joshua era adoptado.
Lori y su quinto y actual marido, Chad Daybell, fueron acusados de estar obsesionados con las profecías del día del juicio final y de creer que las personas podían convertirse en "zombies" poseídos por espíritus malignos.
Según esto, asesinaron a los niños porque eran "obstáculos" en su vida romántica. Ellos creían que todos aquellos que se atravesaban en su camino estaban "poseídos" y eran "zombies".
Durante el juicio, los fiscales describieron a Lori Vallow como una mujer que "eliminaba cualquier obstáculo en su camino" y utilizaba "el dinero, el poder y el sexo para conseguir lo que quería". Su abogado argumentó que Lori Vallow era una madre cariñosa que se interesó por las profecías bíblicas sobre el fin del mundo.
Las autoridades comenzaron la búsqueda de Tylee y Joshua en noviembre de 2019, después de que varios miembros de la familia se pusieran en contacto con las autoridades preocupados porque no habían visto o hablado con los niños desde septiembre. La policía dijo que Lori Vallow y su esposo mintieron a las autoridades sobre el paradero de los niños durante la investigación y no cumplieron con las órdenes judiciales de presentar físicamente a los niños.
Sus restos fueron encontrados al año siguiente, en junio de 2020, en una propiedad de Chad Daybell en el condado de Fremont, Idaho. De acuerdo con documentos judiciales, Joshua, quien tenía necesidades especiales, fue enterrado en un cementerio de mascotas. Los restos de Tylee fueron desmembrados y quemados en un pozo de fuego.
"Usted mató a esos niños para tener un beneficio financiero y eliminar obstáculos, y justificó todo eso amparándose en un cuadro religioso mientras disfrutaba de su vida en Hawaii sabiendo que se estaba buscando a sus hijos", dijo el juez Steven Boyce.
"Los encontraron muertos desmembrados, quemados, enterrados como animales, usted recibió fondos asignados por el Estado a sus hijos y usted se robó ese dinero", aseveró Boyce, subrayando que en ningún momento la acusada mostró algún tipo de remordimiento.
En cuanto a la muerte de Tammy, en octubre de 2019, si bien en un primer momento se calificó como por causas naturales, las autoridades exhumaron el cuerpo y le hicieron una autopsia, que reveló que fue asesinada.
Las autoridades sospecharon ya que Lori y Chad se casaron pocas semanas después de la muerte de Tammy. El juicio de Chad, por asesinato, aún está pendiente. Además, Lori tiene otro juicio pendiente por la muerte de su exesposo Charles Vallow, asesinado por su cuñado después de enterarse de la infidelidad de ella.