EL UNIVERSAL
CIUDAD DE MÉXICO
El caso de un juez de la Corte de Quebec en Canadá ha desatado polémica luego de que saliera en la defensa de un ciudadano, tras una disputa entre vecinos en Beaconsfield, donde dictaminó que señalar a su vecino con el dedo medio "no es un delito" y es parte de un derecho a la libertad de expresión bajo la constitución canadiense.
Los hechos ocurrieron entre marzo y mayo del 2021 en los suburbios del oeste de Montreal cuando Michael Naccache y Neall Epstein comenzaron a discutir, tras esta disputa Naccache levantó un taladro y maldijo a Epstein, mientras que Epstein en respuesta mostró sus dedos medios y balanceó su brazo derecho de manera desdeñosa.
El conflicto no terminó ahí, ya que cuando Epstein regresó a casa de su larga caminata, encontró a policías en las afueras de su domicilio quienes los esperaban con una orden de arresto, por hostigamiento criminal y amenazas de muerte en contra de su vecino.
Primeros reportes señalan que esta disputa entre vecinos ya se había generado durante meses; sin embargo, fue hasta ese día que subieron las tensiones entre ambos residentes.
"Pequeñas trivialidades del vecindario"
De acuerdo con el The Washington Post, el juez identificado como Dennis Galiatsatos calificó las acusaciones como "pequeñas trivialidades del vecindario", además desestimó los cargos en contra de Epstein el mes pasado y calificó el hecho de que la policía interviniera como una "injusticia".
"Para ser muy claro, no es un delito señalar con el dedo a alguien", escribió Galiatsatos en la decisión. "Voltear el pájaro proverbial es un derecho consagrado en la Carta otorgado por Dios que pertenece a todos los canadienses de sangre roja", dijo.
Por su parte, el portavoz de la fiscalía de Quebec dijo a través de un comunicado que la oficina no apelaría la decisión "aunque no estamos de acuerdo con algunos de los hallazgos de la declaración".
¿Qué causó el descontento entre ambos vecinos?
Autoridades indicaron que las tensiones se produjeron a raíz de los hijos y la familia de Epstein se jugaran y realizaran reuniones por el vecindario en medio de la pandemia por el Covid-19.
Fue hasta el 18 de mayo del 2021 que Naccache testificó luego de que Epstein le mostrara el dedo medio y éste pensara que se trataba de un gesto de corte de garganta y un movimiento de puñetazo con la mano tras haber mantenido nuevamente una disputa por renovaciones que Epstein realizaba en su domicilio.
Naccache, aseguró a los oficiales que su vida se sentía amenazada tras este gesto por lo que las autoridades realizaron la detención de Epstein, quien posteriormente proporcionó una declaración voluntaria.
Mientras revisaba las imágenes de las cámaras de video vigilancia, Galiatsatos escribió en su decisión que no había evidencia para respaldar las afirmaciones de Naccache de que temía por su vida.
"¿Sobre qué base temía que el Sr. Epstein fuera un asesino en potencia?" escribió Galiatsatos. "¿El hecho de que saliera a caminar tranquilamente con sus hijos? ¿El hecho de que socializaba con otros padres jóvenes en la calle? Si ese es el estándar, todos deberíamos temer que nuestros vecinos sean asesinos al acecho", indicó.
Es en última instancia el juez acusó de "deplorable" las acciones de los denunciantes, "es deplorable que los denunciantes hayan armado el sistema de justicia penal en un intento de vengarse de un hombre inocente por algunos desaires percibidos que son, en el mejor de los casos, molestias triviales", escribió Galiatsatos.
Al finalizar el caso Galiatsatos dijo que deseaba poder tirar los archivos del caso por la ventana para expresar su desconcierto.