30 de Noviembre de 2024
Director Editorial Lic. Rafael Melendez | Director General - Dr. Rubén Pabello Rojas

Impacto en precios por guerra, lejos de concluir

 

 

 

 

 

 

 

EL UNIVERSAL

CIUDAD DE MÉXICO

A unos días de que se cumpla un año de que estalló el conflicto armado entre Rusia y Ucrania, los precios de algunos alimentos, como los granos, se mantendrán bajo presión por la guerra, consideraron especialistas económicos.

Al enfrentamiento iniciado el 24 de febrero del año pasado se suman también otros factores como el clima, la caída de la producción en Estados Unidos, además de que los precios de los energéticos seguirán volátiles, señalan.

Economistas y organismos internacionales observan que la guerra se combinó tanto con factores internos como externos, lo que provoca afectaciones globales, junto con una crisis energética que provoca bajo crecimiento en ciertos países, de forma que las afectaciones no cesarán hasta que no termine el enfrentamiento.

El director general de Grupo Consultor en Mercados Agrícolas (GCMA), Juan Carlos Anaya, dijo que los precios a futuro del maíz, trigo y de la soya seguirán en niveles mayores a lo visto antes de la guerra.

"Desde la segunda semana de enero del año pasado a febrero de 2023 los precios del maíz han aumentado 38 dólares, es decir 16%", explicó.

Además, agregó, la soya registró un aumento de 13%, es decir, más de 65 dólares desde la segunda semana de enero de 2022 a febrero de 2023, al venderse la tonelada en más de 560 dólares la tonelada.

El precio futuro del trigo está en 321 dólares, pero desde la segunda semana de enero de 2022 a febrero de 2023 los precios aumentaron 47 dólares por tonelada, lo que representa 17%.

Lo anterior tiene que ver con que se afectó la oferta de maíz y trigo que producía Ucrania, lo que se combina con otros factores, como la menor producción de maíz de Estados Unidos y los impactos del clima.

"No es sólo la guerra. También están los impactos del clima que afectan la producción, porque la oferta y demanda aún con inflación se mantienen. Esto lleva a que los mercados estén muy volátiles y hay precios altos", dijo Anaya.

INFLACIÓN NO CEDE

Para el coordinador del Laboratorio de Análisis en Comercio, Economía y Negocios de la UNAM, Ignacio Martínez, la guerra genera presiones sobre la economía, específicamente en la inflación.

"Nos puede seguir impactando en los precios de productos básicos y por lo referente a combustibles. Tendríamos un efecto doble: el beneficio por el precio del crudo, pero un incremento de las materias primas", señaló.

Si bien los precios del petróleo pueden estar altos, como México es importador de gasolina y de gas natural, ese efecto puede trasladarse a otros precios.

Martínez expuso que la guerra en Ucrania "le ha afectado a México en 0.75 puntos porcentuales o tres cuartas partes de la inflación, pero no ha impactado más allá de un punto porcentual al productor".

En México, la inflación repuntó en el primer mes del año, para llegar a 7.91% a tasa anual, impulsada en parte por los precios de los servicios, que no han dejado de aumentar y registraron su mayor alza en casi 21 años, según datos publicados por el Inegi el pasado 9 de febrero.

A los expertos les preocupó que el índice de precios subyacente, que incluye los bienes y servicios cuyos precios son menos volátiles, es decir, la parte dura de la inflación, se aceleró a tasa anual, al pasar de 8.35% en diciembre a 8.45% en enero.

ACTIVIDAD DEPRIMIDA

La guerra entre Rusia y Ucrania impactó la economía mundial pues, por una parte, generó una crisis energética de gran magnitud, así como una desaceleración económica, de acuerdo con las Perspectivas Económicas 2023 de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).

Según el organismo, se "prevé que la economía mundial se ralentice durante 2023 mientras la crisis energética de gran magnitud y proporciones históricas provocada por la guerra de agresión de Rusia contra Ucrania sigue alimentando las presiones inflacionistas, erosionando la confianza, el poder adquisitivo de los hogares y agravando los riesgos en todo el mundo".

La OCDE estimó que la "economía mundial crecerá a un ritmo netamente inferior a la evolución prevista antes de la guerra: un discreto 3.1% en 2022, para después ralentizarse hasta 2.2% en 2023 y recuperarse moderadamente hasta una tasa aún baja de 2.7% en 2024".

"El fin de la guerra y una paz justa para Ucrania serían la forma más efectiva para mejorar rápidamente las perspectivas para la economía mundial", destacó el organismo.

La OCDE estima que la economía mexicana crecerá 1.6% este año, lejos de la estimación oficial del gobierno, de 3%.