
AGENCIAS
CIUDAD DE MÉXICO
Los padres de Chicago batallaron este miércoles por encontrar quién cuidara a sus hijos, mientras una disputa laboral entre la ciudad y el sindicato de profesores obligó a cerrar las escuelas en el tercer distrito escolar más grande de Estados Unidos, dos días después de que los alumnos regresaron a clases tras las vacaciones de invierno.
El sindicato, cuyos miembros votaron abrumadoramente el martes por la noche a favor de no reportarse en los colegios, acusaron al sistema escolar de dar una respuesta torpe a la variante Ómicron del coronavirus, que está impulsando una oleada récord de casos de Covid-19 en la ciudad.
La Alcaldesa Lori Lightfoot insistió en que las aulas de la ciudad son seguras, acusó a los maestros de realizar un paro ilegal de labores y declinó permitir que las clases cambiaran al sistema remoto como sugería el sindicato.
El conflicto dejó a padres como Tonya Patterson con pocas opciones. Esta cajera de banco estaba entre un puñado de padres que dejaron a sus hijos en la primaria Ellington, en el Lado Oeste de la ciudad, donde empleados que no formaban parte de la medida tomada por los maestros estaban proporcionando cuidado para los niños.
"Tengo que ir al trabajo y no tenía tiempo para conseguir una niñera", dijo Patterson. "Estos maestros solo dijeron anoche que no iban a venir".
Patterson culpó a ambos lados por la disputa. Los resultados de la votación del sindicato no fueron anunciados sino hasta las 22:00 horas del martes, y el sistema escolar confirmó que no habría clases hasta después de las 23:00.
La Alcaldesa y el Sindicato de Maestros de Chicago han chocado repetidamente desde que Lightfoot llegó al cargo en 2019. Jesse Sharkey, presidente del sindicato, dijo que el sistema escolar necesitaba hacer un programa más robusto de pruebas de Covid para que los maestros se sintieran seguros de regresar. Pidió hacer exámenes del virus a los alumnos antes de que los salones se reabran, así como realizar una vigilancia de pruebas después de eso.
"Si quieren que regresemos más rápido a la escuelas, proporcionen pruebas", dijo.
Sharkey dijo que esperaba alcanzar un acuerdo con la ciudad y pronosticó que se retomarán las negociaciones el miércoles por la tarde.
Lightfoot, por su parte, acusó al sindicato de crear problemas innecesarios para los padres y defendió los esfuerzos del sistema escolar para mantener seguras las aulas. Funcionarios del Gobierno acusaron al sindicato de ignorar los resultados de investigaciones científicas que afirman que los niños tienen menos probabilidades de enfermar gravemente por Covid-19 que los adultos.
Cuando se le cuestionó a la Casa Blanca la postura sobre el tema en Chicago este miércoles, la vocera de Joe Biden, Jen Psaki, dijo que el Presidente quiere que las escuelas permanezcan abiertas.
"Sabemos que pueden abrir de forma segura y estamos aquí para ayudar a que eso suceda", dijo Psaki.
Aun así, muchas personas en la ciudad están preocupadas de que los niños vayan a las escuelas en momentos en que los contagios se están disparando en la urbe.
En una tienda en el Lado Oeste de Chicago esta mañana, Karen Washington se llevó a su nieta consigo porque los padres de la niña de 6 años estaban trabajando. Washington, cuya nieta estaría en su salón de primer grado en ese momento, defendió las acciones de los profesores.
"Los niños no saben cómo mantener el distanciamiento social", dijo. "Ellos juegan y se quitan las mascarillas".