Según la prensa coreana, hasta poco antes de mediados de la década del 2000, este look era conocido como de ‘contrabandista chino’.
La nueva regulación establece estrictas medidas sobre el largo del pelo.
Las mujeres pueden elegir uno de los 14 estilos, pero quienes sean casadas tienen instrucciones de mantener sus cabellos cortos, mientras que a las solteras se les permite traerlo suelto más tiempo y/o más rizado.
Por su parte, los hombres tienen prohibido llevar el pelo más largo de 5 centímetros, aunque los mayores pueden dejarlo crecer hasta 7 centímetros.
En 2005, cuando el líder supremo era Kim Jong Il, padre del actual gobernante, la televisión estatal norcoreana lanzó una serie titulada “Vamos a cortamos el cabello de acuerdo con el estilo de vida socialista”, el cual promovía el casquete corto.
La propaganda capilar también fue reforzada con convocatorias en la prensa y radio para utilizar el ‘corte de cabello socialista’.
La serie televisiva incluso salió a las calles con cámaras ocultas para detectar a los ciudadanos ‘rebeldes’ que rompían las normas, e incluso propagó la falsa idea de que una cabellera larga quita energía al cerebro.