Al menos, 500 personas han muerto en Aleppo tras diez días de enfrentamientos continuos entre las tropas de Bashar al Asad (respaldadas por Rusia), fuerzas rebeldes y terroristas del frente Al Nursa. Entre las víctimas hay por lo menos 101 civiles, de los cuales 23 son niños, informó el Observatorio Sirio de los derechos Humanos. Cerca de 89 civiles perdieron la vida durante una serie de bombardeos aéreos de las fuerzas gubernamentales y 12 personas bajo el fuego de las tropas rebeldes. Desde el pasado 1 de febrero, el gobierno sirio mantiene una ofensiva en el norte de esa provincia, la segunda mayor del país. Las tropas de Al Asad tratan de recuperar el control de la región que hasta el momento esta en manos de la oposición chiita. “Con el poderío militar ruso, se entra en una guerra asimétrica. Si el régimen sirio, con la ayuda de los rusos, recupera Aleppo,s erá el fin de la guerra clásica”, estimó Bassma Kodmani, ex portavoz del Consejo Nacional Sirio. Naciones Unidas externó su preocupación por los 300mil habitantes que aún quedan en la ciudad y que corren el riesgo de sufrir un cerco humanitario. “Podrían dejar a 300 mil residentes sin acceso a la ayuda humanitaria a menos que se negocie el paso a través de las líneas del frente”, aseguró la oficina dela ONU para la coordinación de asuntos humanitarios. Christy Dalfield, representante de la ONG Mercy Corps, afirmó que al menos 500 mil personas en toda esa región dependen del reparto de alimentos. Por otra parte, un informe de la organización Care International, respaldado por la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, reveló que al menos el 88 por ciento de los hogares acentuados en el sur de siria vive en pobreza extrema. Al inicio del conflicto bélico se calculaba que sólo el 5 por ciento en esa región padecía pobreza, a casi cinco años la cifra se multiplicó 83 puntos porcentuales. A pesar de que Siria era una de las áreas con mayor productividad agrícola ahora sólo el 10 por ciento de la población realiza esta actividad debido al encarecimiento de materias primas para trabajar la tierra como los fertilizantes y las semillas y por los bombardeos aéreos que han dejado devastadas grandes hectáreas de tierra. Actualmente se calcula que el 90 por ciento de los habitantes de Dara y As Sweida dependen de la ayuda humanitaria que diversas ONG les proporcionan. Las familias sirias que dependen de un hombre tienen un ingreso mensual de 123 dólares, mientras que los que dependen de una mujer sobreviven con 90 dólares. La ONU llamó a las partes a sostener un nuevo encuentro para lograr la paz en ese país |