-Human Rights Watch señala además larga lista de altos funcionarios implicados
Agencias
Washington, EU
La Organización No Gubernamental (ONG) Human Rights Watch (HRW) pidió al Gobierno estadounidense investigar por la vía penal al expresidente George W. Bush y varios de los altos funcionarios de su administración, con base en las torturas practicadas por la CIA a sospechosos de terrorismo la década pasada.
En un nuevo informe, HRW sostiene que los funcionarios que "crearon, autorizaron e implementaron" el programa de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) "deberían estar entre los investigados por conspiración para torturar, así como otros crímenes".
Entre ellos cita a Bush, que presidió Estados Unidos entre 2001 y 2009; su vicepresidente, Dick Cheney; su asesora de Seguridad Nacional y más tarde secretaria de Estado, Condoleezza Rice; su asesor legal y después secretario de Justicia, Alberto Gonzales; el director de la CIA hasta 2004, George Tenet; y el exfiscal general John Ashcroft.
Todos ellos, y otra media docena de asesores, autorizaron o estuvieron implicados de algún modo en la práctica de torturas para extraer información a los sospechosos detenidos tras los atentados del 11 de septiembre de 2001 contra Estados Unidos, afirma la organización.
La investigación de HRW concluye que "hay pruebas sustanciales para apoyar la apertura de nuevas investigaciones" contra esos funcionarios sobre posibles delitos criminales, entre ellos "tortura, asalto, abusos sexuales, crímenes de guerra y conspiración para cometer esos crímenes".
Por tanto, pide a la fiscal general, Loretta Lynch, que designe a un fiscal especial para desarrollar una "investigación criminal creíble, meticulosa e independiente" sobre las torturas de la CIA.
La organización recuerda que entre esas torturas hubo prácticas como el ahogamiento simulado –consistente en verter agua sobre el rostro cubierto con una tela para provocar asfixia– o el encadenamiento de los detenidos desnudos en celdas oscuras "durante semanas y meses".