*Muere bebé en incendio en Cisjordania
*Atribuyen ataque a judíos extremistas
Agencias
Jerusalén, Israel
La rabia y el dolor se extendieron este viernes en Palestina, tras el asesinato de un bebé quemado vivo en un incendio presuntamente provocado por colonos extremistas judíos en el norte de Cisjordania.
En el siniestro, que tuvo lugar en la localidad de Duma, cerca de la ciudad cisjordana de Nablus, también resultaron gravemente los padres y el hermano del menor, quienes fueron trasladados a hospitales de la zona.
Saed, padre del menor Alí Dawabsha, está en situación de extrema gravedad, con quemaduras en más de 70 por ciento de su cuerpo; por igual situación atraviesa Rihan, la madre; mientras que Ahmad, de cuatro años y hermano mayor de la víctima, tiene quemaduras en las piernas.
El ataque tuvo lugar sobre las 2:00 horas, mientras la familia dormía, con el lanzamiento de cócteles molotov sobre dos viviendas palestinas, en las que se encontraron pintas en hebreo y la Estrella de David.
Las pintas rezaban las leyendas: "Larga vida al Mesías", "Venganza" y "Lista de precios", expresión utilizada para señalar que un daño a los colonos debe ser "pagado" con otro daño a los palestinos.
Ibrahim Dawabsheh, un residente de Duma, dijo que escuchó a personas pidiendo ayuda desde la casa y corrió hacia ella.
“Vi a dos hombres enmascarados fuera", dijo; fue a pedir ayuda y cuando regresó se habían ido. "Encontramos a los padres afuera con quemaduras; ellos dijeron que había otro hijo en la casa, lo sacamos y luego nos dijeron que había otro niño dentro; pero no pudimos llegar a la habitación a causa del fuego. Se quedó adentro hasta que llegaron las fuerzas de rescate", explicó Dawabsheh.
Los ataques tuvieron lugar después de una semana de protestas de colonos contra la demolición, ejecutada el miércoles, de dos edificios en el asentamiento de Beit El y la expulsión de cientos de colonos del de Samur, en el norte de Cisjordania, evacuado forzosamente hace diez años y al que exigían volver.
Coinciden también con el llamamiento, hace días, del movimiento islamista Hamás a hacer de éste un "Viernes de la Ira", en represalia por los enfrentamientos que tuvieron lugar el pasado domingo entre fuerzas policiales israelíes y jóvenes palestinos.
Éste ha sido el peor ataque de extremistas israelíes desde que un adolescente palestino murió quemado en Jerusalén hace más de un año, tras el secuestro y asesinato de tres adolescentes israelíes por milicianos palestinos en Cisjordania.
Por su parte, el presidente israelí, Reuvén Rivlin, prometió que "se encontrará a los asesinos”; sin embargo, el secretario general de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) y jefe negociador palestino, Saeb Erekat, responsabilizó al Gobierno de Israel por el ataque.
“Ésta es una consecuencia directa de décadas de impunidad que el Ejecutivo israelí ha dado al terrorismo colono", denunció en un comunicado.
“Desde 2004 ha habido más de 11 mil ataques de colonos contra viviendas, coches, iglesias, mezquitas, árboles y otras propiedades palestinas con total impunidad", abundó Erekat.
Entre tanto, Israel aumentó la presencia de sus Fuerzas Armadas en la zona para buscar a los sospechosos, descritos por un portavoz como "dos terroristas enmascarados", y evitar una escalada de violencia.
Empero, los residentes de este pequeño pueblo están enormemente desmoralizados y enfurecidos por el hecho de que las autoridades israelíes "no hagan nada para controlar a los colonos, que atacan las casas, matan a las ovejas y ahora matan a los niños", refirió un vecino de la localidad.
Por lo anterior, autoridades palestinas anunciaron que llevarán el caso ante la Corte Penal Internacional: "Los palestinos necesitan justicia. No creemos en esas notas de condena israelíes; ellos son responsables de lo que ocurre. Si esos colonos están ahí es por una decisión política de Israel. Están protegidos por Israel. Israel no puede ahora sorprenderse de los crímenes cometidos por una cultura de odio que ellos mismos han implantado", declaró Xavier Abú Eid, portavoz de la OLP.
Medio millar de hombres de la pequeña localidad de tres mil habitantes acudió a la oración de la mezquita al mediodía, antes de participar en el funeral del bebé Alí Dawabsha. Las exequias iniciaron con una caravana funeraria que partió del hospital de Rafidia, en Nablus, con dirección a Dum.
El dato
El ataque tuvo lugar cuando la familia dormía, con el lanzamiento de cócteles molotov sobre dos viviendas palestinas, en las que se encontraron pintas con las leyendas: "Larga vida al Mesías", "Venganza" y una Estrella de David.
