*El país sigue sin curarse de sus prejuicios
*Sociedades no borran fácilmente lo sucedido en 200 o 300 años, lamenta
Agencias
Washington, EU
El presidente Barack Obama señaló que aunque las actitudes entre personas de diferentes razas han mejorado, Estados Unidos sigue sin curarse de los prejuicios raciales, ilustrando con un epíteto considerado como ofensivo entre la comunidad afroamericana: "niger" –negro–, el cual sigue siendo empleado frecuentemente entre los estadounidenses.
Dijo lo anterior al insistir en su argumentación a la luz de la masacre en Charleston, Carolina del Sur, cuyo autor dijo haber estado motivado por razones de corte racial.
"El racismo no está curado, y no se trata sólo de no ser respetuoso y decir ‘niger' en público. Ésa no es la medida para determinar si el racismo existe todavía o no. No se trata sólo del racismo evidente. Las sociedades no borran de la noche a la mañana todo lo que ha sucedido 200 o 300 años antes", apuntó.
El mandatario hizo sus comentarios durante una entrevista en el programa del comediante Marc Maron, grabado el viernes mientras realizaba una gira de trabajo por California y dado a conocer este lunes.
El debate racial resurgió con fuerza tras la masacre en la Iglesia Metodista Episcopal Africana Emanuel (AME), en Charleston, donde fueron asesinadas nueve personas, después de revelarse la existencia de un presunto manifiesto del autor confeso, Dylan Storm Roof, de 21 años de edad.
En un documento de cuatro páginas publicado en un sitio en Internet denominado The Last Rhodesian (El último Rodesiano) creado en febrero pasado, Roof ventiló su enorme prejuicio contra los afroamericanos, al igual que contra los judíos, hispanos, asiáticos y su desdén sobre el patriotismo estadounidense.
En su diatriba hacia los afroamericanos, Roof los acusó de tener un temperamento violento, coeficiente mental inferior a los blancos, un sentido de inferioridad frente a éstos y de tener el tema racial presente de manera permanente, una de las razones por las que, dijo, "se ofenden con facilidad".
Calificó la segregación como "un mecanismo de defensa" y que la integración racial "no ha hecho otra cosa que colocar a los blancos al nivel de los animales brutos".
Igualmente, dijo que los hispanos son "un enorme problema para los estadounidenses". "Pero hay hispanos buenos e hispanos malos", indicó, haciendo notar el hecho de que los hispanos que aparecen en los comerciales de la televisión en español "son más blancos que nosotros".
El dato
El debate racial resurgió con fuerza tras la masacre en la iglesia de Charleston, donde fueron asesinadas nueve personas de origen afroamericano.