Destacó que el titular de la Procuraduría Federal de Protección al Medio Ambiente (Profepa), Guillermo Haro Bélchez, está en la zona siniestrada de Sonora, supervisando los peritajes, que confió estén concluidos la próxima semana para establecer y dar a conocer las sanciones a las que se hará acreedor Grupo México por el derrame tóxico.
“Se va a actuar con estricto apego a la ley; lo que necesitamos es garantizar que fenómenos de este tipo no se vuelvan a repetir en el país”, subrayó.
"Yo espero que el próximo lunes o martes, en base a los estudios que están haciendo los peritos, se pueda emitir un dictamen y una opinión y, en consecuencia, tomar las medidas procedentes", añadió.
Reiteró que la mina es la responsable directa de verter 40 mil metros cúbicos de sulfato de cobre a los ríos Sonora y Bacanuchi, por una falla en las piletas que contenían esta substancia.
Expuso que al inicio de esta administración, de las mil 300 minas que existen en el país, se revisaron 300 y se clausuraron 20, pero reconoció que las minas de Grupo México aún no han sido inspeccionadas.
Crecen voces contra minera
Ante la contingencia ambiental, diversos sectores se han pronunciado por suspender las actividades de la mina Buenavista del Cobre, explotada por Grupo México.
A los reclamos de los pobladores afectados se han unido trabajadores mineros, así como autoridades ambientales, quienes han iniciado procesos legales en contra de la empresa responsable.
A estas acciones se han sumado diputados y senadores, quienes pidieron detener los trabajos de la mina en Cananea hasta que no se evalué el impacto ecológico en su totalidad.
Aquí presentamos un recuento de las reacciones en contra de la minera Buenavista del Cobre por el derrame de sustancias químicas.
“El peor desastre ambiental” en Sonora: Greenpeace
La organización ambientalista Greenpeace México calificó al derrame tóxico ocurrido el 6 de agosto en el río Sonora como el "peor desastre ambiental" en dicho estado.
Sin embargo, Greenpeace señaló que el derrame en el río Sonora es sólo la punta del iceberg de la contaminación tóxica de los ríos mexicanos. De acuerdo con la Comisión Nacional del Agua, 70 por ciento de los ríos nacionales presenta algún grado de contaminación, pero poco o nada se está haciendo para revertirlo y mucho menos para prevenir.
La laxitud de leyes, agregó la asociación, permite a las empresas seguir contaminando, pues en teoría se les exige un “pago” o la “reparación del daño” en la zona donde ocurrió el desastre, pero sin tomar en cuenta las externalidades".
Por ello, Greenpeace demandó que se cumpla a cabalidad el compromiso de la empresa Grupo México y el Gobierno para una verdadera remediación de los daños.