Esta temporada, la piel del rostro suele estar mucho más sensible que de costumbre, por lo que después de las transformaciones icónicas para las fiestas, es necesario darle un cuidado especial
Agencias
México
Cada vez falta menos para que una de las celebraciones más divertidas y enigmáticas suceda alrededor del mundo: Halloween. Y es que no importa desde que parte del mundo leas esto, pues cada región ha sabido adaptar esta festividad con sus tradiciones y costumbres, llegando a crear un ambiente que sólo puede percibirse una vez al año. Pero lo que sí es una constante son los disfraces y maquillajes que nos ayudan a convertirnos en nuestros personajes favoritos por una noche.
Es así como cada Halloween, millones de personas alrededor del mundo se embarcan en la emocionante aventura de transformar sus rostros con maquillajes sorprendentes, desde fantasmas etéreos hasta criaturas terroríficas y encantadoras. Sin embargo, la piel muchas veces sufre las consecuencias de estos productos pesados, cargados de pigmentos y elementos de larga duración; porque si bien Halloween es una noche llena de diversión y creatividad, no debemos subestimar el impacto que puede tener sobre nuestra piel.
Según la American Academy of Dermatology (AAD), el maquillaje de larga duración y los productos resistentes al agua pueden obstruir los poros y alterar el equilibrio natural de aceites en la piel, provocando sequedad e irritación. Especialistas en el campo dermatológico, también señalan que el uso de maquillajes ultra pigmentados tiende a provocar una acumulación de residuos en la capa córnea de la piel y este efecto es particularmente notable cuando se utilizan cosméticos teatrales o "maquillaje de efecto especial", los cuales suelen incluir sustancias más resistentes que el maquillaje diario convencional.
Guía completa para una rutina de cuidado de la piel post-Halloween
Sin duda alguna, Halloween es una noche especial para explorar la creatividad y divertirse con el maquillaje, pero es importante recordar que la piel requiere cuidados y atención especiales para recuperarse. Por ello, se recomienda implementar una rutina de cuidado de la piel adecuada y utilizar productos de calidad durante esta época del año, pues además del clima frío, los maquillajes para Halloween pueden terminar por dañar tu rostro y aquí te comparto una serie de pasos con los que podrás revitalizar la piel de la cara después de lucirte en tu fiesta de disfraces.
Paso 1: retira todo rastro de maquillaje
El primer paso esencial es emplear un desmaquillante a base de aceite, ideal para disolver los productos a prueba de agua y los maquillajes de larga duración. Dermatólogas expertas sugieren un lavado "doble" para asegurarse de que cada traza de pigmento y brillo se elimine sin agredir la piel, especialmente en áreas sensibles como los ojos y labios. Opta por fórmulas bifásicas o aceites limpiadores suaves, ya que estos pueden penetrar incluso en los maquillajes más densos sin causar irritación ni dejar residuos grasos.
Paso 2: limpieza doble para profundizar
Después, realiza una limpieza doble para asegurarte de retirar todo el maquillaje; comienza con un limpiador a base de aceite para disolver el maquillaje restante y, seguidamente, utiliza un limpiador a base de agua adecuado para tu tipo de piel. Según estudios, esta técnica permite una limpieza profunda sin alterar el pH de la piel, eliminando residuos de manera efectiva y minimizando el riesgo de obstrucción de los poros; además, este paso asegura una tez fresca y preparada para el tratamiento posterior.
Paso 3: exfoliación suave para renovar la piel
El siguiente paso en el proceso de restauración es la exfoliación ya que ésto ayuda a eliminar células muertas, promoviendo una renovación celular saludable y previniendo la opacidad y textura desigual en el rostro. Opta por exfoliantes de base enzimática o con ácidos suaves como el ácido láctico, en lugar de exfoliantes físicos que pueden dañar la barrera de la piel, sobre todo después de una noche de uso intenso de maquillaje.
Paso 4: aplicación de una mascarilla hidratante
Después de exfoliar, es importante restaurar la humedad en la piel mediante una mascarilla hidratante, ingredientes como el ácido hialurónico y el aloe vera son ideales para rehidratar y calmar la piel. Por ello, se sugiere utilizar mascarillas de tela que contienen estos ingredientes, ya que ofrecen una penetración profunda y una recuperación rápida; de la misma forma, las mascarillas caseras de ingredientes naturales también pueden ser efectivas, siempre y cuando se eviten productos irritantes o ácidos que puedan causar sensibilización.
Paso 5: aplicación de un tónico para equilibrar el pH
Los tónicos ayudan a restaurar el pH natural de la piel, un paso necesario después de usar limpiadores que, en ocasiones, pueden alterar su equilibrio. Expertas sugieren tónicos con ingredientes calmantes como agua de rosas o centella asiática, recomendados ampliamente por sus propiedades antiinflamatorias, éstos componentes pueden reducir la irritación y mejorar la absorción de los productos hidratantes y reparadores posteriores.
Paso 6: sérum reparador para nutrir y revitalizar
El uso de un sérum con activos reparadores es ideal para revitalizar y fortalecer la piel, ingredientes como el ácido hialurónico y antioxidantes como la vitamina C ayudan a combatir los efectos dañinos de los radicales libres y promueven la hidratación profunda. Dermatólogas expertas recomiendan el uso de sérums con estos componentes después de una noche de maquillaje extremo, ya que estos pueden reparar y aportar luminosidad a la piel, devolviéndole un aspecto saludable.
Paso 7: crema hidratante para sellar la humectación
La hidratación es clave para sellar todo el trabajo anterior, por lo que se aconseja elegir una crema hidratante con ceramidas o lípidos naturales, los cuales ayudan a reconstruir la barrera cutánea. Esto es esencial, especialmente después de usar productos de maquillaje de larga duración que pueden secar la piel; los aceites naturales como el aceite de jojoba o el de almendras también son recomendados para una nutrición profunda sin dejar una sensación grasa.
Paso 8: protección solar para evitar daños posteriores
El último paso, pero no menos importante, es la protección solar, pues aunque el maquillaje se haya usado de noche, la piel puede quedar sensibilizada y vulnerable al sol al día siguiente. "Skin Cancer Foundation" enfatiza que, al menos, se debe aplicar un protector solar de amplio espectro con SPF 30 para evitar la formación de manchas y proteger contra los rayos UVA y UVB; las expertas recomiendan fórmulas ligeras y de fácil absorción que permitan una aplicación continua cada 2 o 3 horas.
¿Qué es halloween y por qué se celebra?
El origen de Halloween se remonta a la antigua festividad celta de Samhain que tuvo lugar hace unos 2,000 años en lo que hoy es Irlanda, el Reino Unido y el norte de Francia. Los celtas celebraban su Año Nuevo el 1 de noviembre, marcando el fin de la temporada de cosechas y el inicio del invierno, una época asociada a la oscuridad y el frío, por lo que la noche del 31 de octubre, en vísperas de Samhain, se creía que el velo entre el mundo de los vivos y el de los muertos era más delgado, permitiendo que los espíritus cruzaran hacia el mundo de los vivos.
Durante Samhain, los celtas encendían hogueras sagradas y realizaban rituales para ahuyentar a los espíritus malignos, mientras que otros se disfrazaban con pieles de animales y máscaras para evitar ser reconocidos por los espectros. De este modo, Samhain servía como una forma de honrar a los ancestros y de protegerse de cualquier influencia maligna.
Con la expansión del cristianismo y la influencia de la iglesia católica, Samhain se fue transformando y en el siglo VIII, el Papa Gregorio III declaró el 1 de noviembre como el Día de Todos los Santos, o "All Hallows' Day". La noche anterior se conoció como "All Hallows' Eve" (Víspera de Todos los Santos), que eventualmente derivó en “Halloween”; esta festividad cristiana buscaba reemplazar las prácticas paganas, pero muchas de las tradiciones originales de Samhain persistieron y se integraron en la celebración de Halloween.
Durante la gran inmigración irlandesa del siglo XIX, Halloween llegó a Estados Unidos, donde se popularizó rápidamente y con el tiempo, las costumbres se adaptaron y evolucionaron, y Halloween se convirtió en una festividad secular llena de actividades y costumbres que conocemos hoy, como el truco o trato, las fiestas de disfraces y las decoraciones con temas de terror.
¿Qué día es Halloween?
Halloween se celebra el 31 de octubre, una tradición que tiene raíces en el antiguo festival celta de Samhain, cuando se creía que los espíritus podían cruzar al mundo de los vivos. Esta festividad llegó a Estados Unidos a través de inmigrantes irlandeses en el siglo XIX y ha evolucionado en una noche de disfraces, dulces y decoraciones espeluznantes. Hoy en día, Halloween se festeja en muchos países, combinando diversión y creatividad con temas de terror y lo sobrenatural.
Nota tomada del Heraldo de México