Con más de cuatro mil espectadores dentro de la Alhóndiga de Granaditas, fue reconocido el talento de la primera orquesta formada en nuestro país.
Jorge Volpi, Director General del Festival Internacional Cervantino, en la presentación general comenta: “Vivimos en una época que ha separado drásticamente la ciencia del arte. Dos culturas en pugna, como advirtió hace décadas el escritor inglés C.P. Snow. Antes del siglo XIX, artistas y científicos compartían un marco de referencia, mientras que hoy nos enfrentamos a una especialización extrema que divide de manera tajante estos dos mundos.
Para su cuadragésima tercera edición, el Festival Internacional Cervantino, consolidado como la cita artística más importante del continente americano, retoma la idea del conocimiento unificado para mostrar los vínculos que unen a estos dos universos, dedicando uno de sus dos ejes temáticos a La ciencia del arte. El arte de la ciencia.
Un concierto con proyección en pantalla gigante de imágenes tomadas por la NASA, pasando por la coreografía para bailarines y robots de Blanca Li, hasta la exploración de la sinestesia por parte de Peter Brook, son ejemplo de esta unión entre ciencia y arte.
La programación ha contemplado las intervenciones de los premios Nobel de Física y Química, George F. Smoot y Roald Hoffmann; los monólogos científicos del grupo español The Big Van Theory.
Esperando el estreno en México de la Sinfonía Doctor Atomic, de John Adams.
Citando esta presentación tal cual se demuestra que la Orquesta Sinfónica de Xalapa (OSX) tenía un peso de suma importancia, pues como se lee, es el primer evento mencionado.
A la calidad del sonido de la OSX, se sumó la fusión de proyección número 110, de la propuesta escénica y multimedia del astrónomo y fotógrafo experimental José Francisco Salgado, que incluyó la proyección de imágenes reales de los planetas — tomadas por la NASA— que en su momento imaginó Holst.
La OSX fue tapada por una pantalla gigante, mientras se proyectó la película de los planetas, hubo dos pantallas laterales donde se pudieron ver a los músicos,
Justo al final el telón se abrió y permitió ver a la Orquesta y al director Lanfranco Marccelleti Jr., la reacción del público fue pararse, este gesto es un honor supremo para un músico, la sensibilidad, la emoción, rompió las barreras del Arte y la Ciencia, Salgado también fue reconocido y ovacionado, de tanta emoción pidieron 4 ancores, si por los espectadores fuera, se hubiera prolongado el Concierto toda la noche.
Tocar o ser figura de un Cervantino es un honor, los músicos de la OSX, recordaran este día como único, marcando su trayectoria como una Orquesta afinada, admirada, que trasmite al público, al grado de hacerlo llorar y gritar de la emoción.
Los movimientos fueron y los planetas proyectados: Marte, el portador de la guerra; Venus, de la paz; Mercurio, el mensajero alado; Júpiter, el portador de la alegría; Saturno, de la vejez; Urano, el mago, y Neptuno, el místico. Siete influencias del destino, siete brillantes fragmentos sonoros que integraron una de las piezas sinfónicas más importantes de la historia: la suite orquestal Los planetas.
Para que la música de las esferas fuera posible, se requirió de un artefacto sonoro capaz de una hazaña astronómica, con una precisión para concordar la película con la música en vivo que la OSX con 86 años de existencia, asumió la misión, un gran reto y marco porque su peso en este XLIII edición del Festival Internacional Cervantino era tan importante.
A nombre de la OSX, se agradece el apoyo de la Universidad Veracruzana, al Gobierno del Estado de Veracruz, a Jorge Volpi por hacer renacer el Cervantino como el Fénix, director de esta edición del Festival, al Gobierno de León, Guanajuato, a todo el equipo del Cervantino que los trato con amabilidad, tacto y por ser excelentes anfitriones de un evento tan importante a nivel Internacional.